El capitán de Alemania, Philipp Lahm, aseguró el domingo que su equipo se mereció el título de campeón mundial logrado en Brasil al derrotar por 1-0 a Argentina en la final.
«El equipo mereció absolutamente el título», dijo el defensa, que fue el encargado de levantar la Copa del Mundo en el estadio Maracaná de Río de Janeiro.
«Es algo que uno siempre ha soñado», añadió el jugador del Bayern Múnich. «En las últimas semanas, lograr el título y levantar la copa pasó de ser un sueño a un objetivo. Ahora es una sensación increíble», señaló.
Lahm unió el título de campeón mundial a los que había logrado anteriormente con su club, con el que en 2013 logró el «triplete» conquistando Liga, Copa y Liga de Campeones.
Si eso convierte a la actual generación de futbolistas alemanes en la mejor de la historia del país, es algo que Lahm prefirió no juzgar.
«Yo no tengo que decidirlo. Pero siempre he dicho que a una generación dorada le hacía falta ganar títulos internacionales. Fuimos campeones de la Liga de Campeones y ahora campeones del mundo. No hay muchos equipos que lo hayan logrado en la historia alemana», advirtió.
Respecto a la final ante Argentina, que se resolvió con un gol de Mario Götze en el minuto 113, el lateral de 30 años dijo que el partido había sido «muy duro».
«Sabíamos que no íbamos a ir ganando 5-0 en el minuto 30 como en semifinales y que teníamos por delante un trabajo más difícil. Tal y como ha pasado», afirmó.
No obstante, Lahm siempre confió en el título. «Siempre tuve esa sensación, porque tengo confianza en el equipo y sé la calidad que tiene», señaló.
En cuanto a su continuidad en la selección, el capitán eludió una respuesta clara.
«Hoy no es el momento de hablar de quién sigue y quién no. Da totalmente igual. Hoy hay que celebrar», dijo.