Phelps bate récord olí­mpico


El primer dí­a en la piscina de los Juegos de Pekí­n-2008 sirvió al estadounidense Michael Phelps, que busca ocho oros, para avisar de sus posibilidades batiendo el récord olí­mpico de 400 m estilos, mientras que el noruego Alexander Dale Oen hizo lo propio en 100 m pecho.


Es tanta la expectativa en torno a Phelps y su intento por superar las siete medallas que ganó Mark Spitz en Múnich-1972, que nadie se vio demasiado impresionado por la nueva marca de 04:07:82, muy lejos del récord mundial que ostenta el estadounidense con 04:05:25.

«No me esperaba que la clasificación fuera tan rápida, y tras ver las dos primera carreras querí­a ser el mejor ubicado mañana», dijo Phelps a periodistas poco después de la prueba.

La final de los 400 m estilos individual se disputará mañana por la mañana y se espera que el nadador de Baltimore se cuelgue su primer oro de la campaña en Pekí­n.

Pero el que es considerado su máximo rival, el también estadounidense Ryan Lochte, que pese a no tener una buena serie clasificó con el cuarto tiempo, dijo que la final «va a ser dura, estoy seguro de que le voy a pelear su primera medalla».

Los demás candidatos lograron los puestos en donde se los esperaba ver: el húngaro Laszlo Cseh clasificó en segundo lugar y el italiano Luca Marin en tercero. Todo listo para un duelo de titanes.

Horas después fue el noruego Oen el que sorprendió con un récord olí­mpico en la preliminar de los 100 m pecho, (59:41), algo inesperado si se piensa que todaví­a resta la semifinal y la final.

El nadador nórdico no se mostró sin embargo muy impresionado con el logro: «es algo que podí­a pasar tan temprano y ahora todo se ve muy bien para las semifinales, trataré de hacer lo mejor, de hacer mi propia carrera», dijo a periodistas.

Otro que batió marcas fue el estadounidense Larsen Jensen, que en su caso superó el récord de las Américas para los 400 m libre, con un tiempo de 3:43:10.

Detrás de Jensen y en el quinto puesto se ubicó el australiano Grant Hackett, que busca su tercer oro consecutivo en los 1.500 m pero no se sintió incómodo en esta distancia.

«Va a ser interesante mañana por la mañama, es una carrera para cualquiera en este momento», estimó.

Entre las mujeres y en 400 m estilos quedó todo listo para un duelo de campanillas entre las estadounidenses Elizabeth Beisel, Katie Hoff -poseedora del récord mundial con 04:31:12-, la australiana Stephanie Rice y la zimbabuense Kirsty Coventry.

Hoy prevaleció Beisel con 04:34:55, claro indicador de que todas reservaron energí­as y no está nada dicho de cara a la final.

Rice dijo estar «más concentrada en el proceso y esperando el desafí­o», Hoff afirmó que «todo está bien, no estuvo tan mal» y Coventry estimó que «estuvo bien, es la primera vez que tomo parte en este evento, y se trataba de zambullirse, entrar en acción y dejar atrás los nervios».