Mario Gordillo, procurador general de la nación, interpuso un recurso de amparo en la Corte de Constitucionalidad (CC) contra el presidente ílvaro Colom, con el fin de frenar las presiones del Ejecutivo que buscan destituirlo del cargo.
lahora@lahora.com.gt
El funcionario indicó que el gobierno ha solicitado la intervención de la Procuraduría General de la Nación en varios procesos que a su criterio son irrelevantes, en los que él no tiene una importante participación.
Gordillo refirió que el lunes pasado se tuvo que movilizar a todo el personal de la PGN en las sedes regionales para trabajar en 14 casos solicitados por el Ejecutivo, entre los que figura un juicio por pensión alimenticia y reclamos por el extravío de documentos de identificación. «Casos donde la procuraduría no tiene nada que ver», señaló.
Asimismo, expuso que en algunos casos se ha impuesto plazos de 48 y 72 horas para obtener resultados concretos, lo que a su consideración es muy difícil de cumplir ya que no se cuenta con todos los recursos para completar las investigaciones en pocas horas.
El procurador considera que los requerimientos del presidente pueden ser catalogados como «distractores», con los que se pretende motivar a la PGN a incurrir en errores con los que posteriormente se podría justificar su destitución del cargo.
«Pareciera que la idea es que el procurador no cumpla con algo y que fuera motivo de justificación para la remoción del cargo», puntualizó
Gordillo comentó que la intención de removerle del cargo podría no ser exclusiva del presidente, y que existen personas allegadas al mandatario con interés en oficializar destituciones.
Ante la medida adoptada por Gordillo se pronunció el presidente en funciones, Rafael Espada, quien argumentó que el funcionario puede «elevar hasta el cielo» sus intervenciones, no obstante señaló que el Ejecutivo ha fijado ya su postura al respecto dejando claro que por los intereses inmersos en el cargo sería mejor que abandonar el puesto.