Aunque varias partes «clave» de la ley antiinmigrantes de Arizona se encuentran entrampadas por un fallo judicial, autoridades locales y activistas por los derechos de los migrantes en México y Centroamérica dan cuenta de crecientes preocupaciones por el posible arribo masivo de connacionales expulsados de Estados Unidos.
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Aunque la ley SB 1070 -aprobada el 23 de abril último- no entrará en vigencia por completo, persiste el temor por las iniciativas que pretenden dar potestad a las autoridades estadounidenses para detener a las personas que encajen con el perfil de un indocumentado.
De las más recientes se pueden mencionar la H8142 de Rhode Island, que ya fue desestimada y la ordenanza municipal 5165 de Fremont, Nebraska, que sí fue aprobada.
A todas luces, este tipo de legislación es considerada como racista, pues será aplicada a los inmigrantes de origen hispano, entre los que se encuentran mexicanos, salvadoreños, hondureños y guatemaltecos, entre otros.
Ubaldo Villatoro, activista por los derechos de los migrantes, señaló que Guatemala tiene muy poca capacidad para recibir y facilitar un empleo a los connacionales que sean deportados de los Estados Unidos, frente a una inminente ola de deportaciones que se espera con la aplicación de la ley antiinmigrantes.
De acuerdo con el activista, cerca de 30 mil guatemaltecos corren riesgo de ser expulsados de Arizona, pero sólo algunos podrían obtener un empleo digno al llegar a suelo guatemalteco, lo cual sugiere que se deben emprender acciones para paliar esa situación.
«Seguramente que los deportados vendrían a engrosar las filas de desempleados», resaltó.
Entre tanto, la Cancillería guatemalteca emitió una serie de recomendaciones a los inmigrantes indocumentados para evitar que sean detenidos por la Policía y reduzcan el riesgo de ser deportados.
El Ministerio de Relaciones Exteriores, entre otras sugerencias, propone a los inmigrantes que no quebranten las leyes de los Estados Unidos y eviten ser parte de conflictos en la vía pública o en las carreteras.
Por otro lado, en declaraciones a la prensa, el gobernador de Sonora, México, Guillermo Padrés, dijo carecer de certeza sobre el impacto de la legislación, pero señaló que estarán obligados a adoptar medidas urgentes para reforzar seguridad, programas sociales, empleo y capacidad en albergues.
El retorno masivo de los emigrados implica garantizar acceso a vivienda, educación y seguridad, sobre todo para los que regresen por la localidad fronteriza de Nogales, uno de los ayuntamientos más violentos del estado, indicó.
Debido al clima de incertidumbre, el Distrito Federal de México contrató abogados en Arizona, confirmó la secretaria de Desarrollo Rural y Equidad para las Comunidades, Rosa María Márquez.
Los juristas, explicó la funcionaria, brindarán asesoría a los migrantes, a fin de evitar violaciones a sus derechos humanos si resultan detenidos.
SALEN DE ARIZONA
Testimonios difundidos en la capital mexicana señalan que numerosos indocumentados de origen centroamericano y mexicano comenzaron a salir de Arizona por miedo a las represalias, días antes de que se conociera el fallo que bloquea parte de la ley.
Otros emprendieron gestiones de autodefensa como vigilar la actuación de la Policía, dijo al periódico El Financiero uno de los integrantes del Frente de Mexicanos en el Exterior, Al Rojas.
Estamos organizados a lo largo y ancho de Arizona; además, tenemos el apoyo de agrupaciones pertenecientes a estados vecinos como Texas y California, aseguró el entrevistado, que persistirá en la cruzada por la defensa de los indocumentados.
La idea es cuidarnos unos a otros; como decimos, echarnos la mano y, cuando se produzca una detención, inmediatamente comunicarnos entre nosotros para dar aviso a las redes de abogados con los que contamos y a las autoridades de los consulados mexicanos, indicó.
De acuerdo con la cancillería mexicana, la red consular de México en Arizona prosigue la distribución de un folleto informativo, en el que pide a los paisanos no precipitarse y actuar con calma en caso de ser apresados.
Con el título ¿Qué es y qué consecuencias tiene la firma de la Ley SB 1070?, el texto recomienda respetar las reglas de tránsito para evitar ser detenido por las autoridades locales, no manejar en estado de ebriedad, cumplir las reglas de buena convivencia, evadir discusiones en la vía pública y portar documentos sobre su estatus legal.
Además, sugiere tramitar el registro como mexicanos de los hijos nacidos allí y del menaje de casa para que, de ser deportados, puedan recuperar las pertenencias.
PROTESTAS
«Desde este lunes en la mañana hasta el jueves estaremos con docenas de compañeros activistas manifestándonos con pancartas en las entradas principales del centro de Los íngeles a la autopista de Hollywood», una de las vías con mayor tráfico en California, explicó Paulina González, portavoz de la organización «We Are All Arizona» (Todos Somos Arizona).
«Nuestras protestas serán en las horas de mayor tránsito en la mañana y en la tarde hasta el jueves», precisó.
Otras organizaciones defensoras de los inmigrantes en Los íngeles, una de las ciudades de California -y Estados Unidos- con más grupos de activistas mexicano-estadounidenses y de Centroamérica, tienen contemplado manifestarse en la ciudad el jueves e incluso partir en una caravana de unas seis horas hasta Phoenix, la capital de Arizona, donde entrará en vigor la ley.
La ley SB 1070, proclamada por la gobernadora de Arizona el pasado 23 de abril tras su votación en el Congreso estatal, declara la inmigración ilegal como un delito estatal por primera vez en la historia de Estados Unidos, no obstante, un fallo judicial la bloqueó parcialmente
La normativa establecía que la Policía podía confirmar el estatuto de aquellas personas sospechosas de estar en el país sin documentos migratorios y castigar a quienes se hayan contactado con ellos en este estado fronterizo con México.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Guatemala emitió una serie de recomendaciones para que los inmigrantes eviten ser detenidos por la Policía. Respetar las Leyes y los reglamentos de los Estados Unidos. Respetar las señales y reglas de tránsito. No manejar sin licencia de conducir. Si ingiere bebidas alcohólicas, no maneje. Evite conflictos y discusiones en la vía pública. Cumpla con las reglas de su domicilio. Porte documentos de identificación. Si es detenido, colabore con las autoridades. íšnicamente tiene la obligación de proporcionar su nombre y fecha de nacimiento. No se oponga a la detención o arresto. Colabore con las autoridades. No firme ningún documento que no entienda. Solicite hablar con el Consulado de Guatemala. Solicite un abogado, no debe dar declaraciones hasta que cuente con un abogado. Si no tiene cómo pagar uno, el estado de Arizona tiene la obligación de proporcionárselo.
Casi la mitad de los estadounidenses considera que la inmigración en el país debe disminuirse, contra un 17% que aboga por incrementarla, reveló ayer un sondeo de Gallup, a dos días de que entre en vigencia una polémica ley antiinmigrantes en el estado de Arizona.
La encuesta telefónica, realizada a nivel nacional entre el 8 y el 11 de julio, arrojó que un 45% de los estadounidenses estima que la inmigración debe reducirse, un 34% está a favor de que se mantenga en los niveles actuales y un 17% que se aumente.
No obstante, el año pasado la brecha entre los extremos era más pronunciada: 50% quería disminuir la inmigración y 14% aumentarla, indicó Gallup, quien aclaró que desde los ataques del 11 de septiembre de 2001 los estadounidenses han tenido una postura más negativa frente a la inmigración.
El jueves debe entrar en vigencia la ley en Arizona, estado del suroeste fronterizo con México, que establece por primera vez en Estados Unidos como delito estatal la inmigración ilegal.
El gobierno de Barack Obama, quien aboga por una reforma migratoria integral que abra el camino a la legalización de los once millones de indocumentados que viven en Estados Unidos, la mayoría de ellos hispanos, introdujo una demanda contra la ley de Arizona, pero aún no ha habido una decisión en los tribunales.
El sondeo también encontró que la mayoría de los estadounidenses (57%) considera que la inmigración en general ha sido favorable para el país, contra 36% que estima que ha sido negativa.
No obstante, el porcentaje de estimación positivo es uno de los más bajos registrados en la última década, advirtió Gallup.
La encuestadora recordó que en otros sondeos los estadounidenses se han mostrado más proclives a apoyar la ley de Arizona y a rechazar la demanda en contra del Gobierno.
Guillermo Padrés
GOBERNADOR DE SONORA
Paulina González
We Are All Arizona