El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, al finalizar la iniciativa “Tengo algo que dar”, en el marco del programa Hambre Cero, dijo conocer las duras condiciones en las que vive la gente del campo en pobreza y extrema pobreza. Además, aseguró que trabajará para que esa situación mejore.

El mandatario guatemalteco convivió el fin de semana pasado con varias familias en las condiciones indicadas, principalmente con la familia Vásquez Lucas, en Huitán, en el departamento de Quetzaltenango, en cuyas jornadas de trabajo realizó las labores que los integrantes de esas familias hacen para subsistir.

Entre éstas, Pérez Molina troceó y llevó leña a uno de los hogares, que luego sirvió para cocinar y se alimentó con las mismas raciones de la familia que lo albergó. El mandatario almorzó papas cocidas y tortillas de comal, acompañadas de chirmol.

Por aparte, fueron unas 5 mil personas las que participaron en esta actividad, entre voluntarios y personal del gobierno, en la que según Luis Enrique Monterroso, titular de la Secretaria de Seguridad Alimentaria y Nutricional (Sesan), dijo que la actividad consistió, de parte de los voluntarios, en “ver a otro ser humano, no de conmiserarse de una realidad, sino de compartir y buscar soluciones conjuntas”.

En horas de la mañana del sábado, el Presidente manifestó sentirse motivado para realizar las actividades que le demandara su visita a la familia que le fue asignada.

“Sé lo duro que es vivir en el campo, con hambre y padecer de desnutrición, por eso me comprometo a seguir trabajando para lograr que las condiciones vayan cambiando”, declaró el mandatario, al finalizar la actividad, donde además, hizo entrega de varios enseres para las familias.

BALDETTI, EN SUMPANGO
Por su parte, la vicepresidenta, Roxana Baldetti, estuvo principalmente en Sumpango, departamento de Sacatepéquez, con otra de las familias seleccionadas para la actividad, donde también recolectó leña en lugares cercanos a la vivienda, además de ayudar a cocinar el desayuno.

“Pasé una noche con mucho frío y comprobé las dificultades que conlleva la vida para las personas con menos recursos”, dijo Baldetti, al finalizar la actividad.

Sobre las condiciones en que viven las familias visitadas, la vicemandataria dijo que “esta es la realidad de los guatemaltecos”, mientras agregó que “lo que pasa, es que los que vivimos en la capital no conocemos la realidad que vive la gente del campo”.

“Esto no es un cambio de un día para otro”, dijo Baldetti. Si no que “es un cambio de mucho tiempo, uno que llevará años”, y “ojalá que nosotros lo iniciemos, pero que los jóvenes puedan continuar y concluir esa Guatemala que todos estamos esperando”, destacó.

Según se informó en días previos, los voluntarios pasarían la noche del sábado en lugares distintos a las viviendas de las familias.

El binomio presidencial y el conjunto del gabinete de gobierno convivieron con familias en pobreza en los departamentos de Chimaltenango, Sacatepéquez, Huehuetenango y Quetzaltenango, en el marco del programa “Todos Tenemos Algo que Dar”, durante el fin de semana pasado.

Por último, el mandatario apadrinó a tres niños, lo cual servirá para la educación de éstos, y además, invitó a la población para hacer lo mismo.