El presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, señaló frustración sobre los últimos casos judiciales que terminaron con la puesta en libertad de los sindicados de cometer ciertos delitos en perjuicio de los intereses nacionales.
larevalo@lahora.com.gt
Pérez Molina dijo que en general, para los guatemaltecos “es frustrante” ver que en casos emblemáticos por lo que representan, los acusados “salgan con una sonrisa como que si nada hubiera sucedido”.
Esas declaraciones las hizo en referencia al caso de quien fuera Fiscal General, David de León Argueta, cuyo proceso concluyó en un día, al ser detenido por la mañana por una acusación de supuesto lavado de dinero y absuelto por la noche, por la jueza a cargo del caso, por supuestamente no encontrar evidencia que lo ligaran al proceso.
Adicional a esto, calificó los resultados de ese tipo de procesos como “chocantes”, y según refirió, este tipo de acontecimientos en el sistema de justicia guatemalteco, le dan mayor fuerza a la propuesta de reforma estatal que está proponiendo el Organismo Ejecutivo.
Según agregó el mandatario, la prioridad de la reforma estatal y constitucional que busca enarbolar el Gobierno, es el sistema de justicia nacional, sobre el que ya existe una propuesta realizada por las universidades San Carlos y Landívar.
Por otra parte, Pérez Molina dijo: “estamos cansados de esta burla al pueblo de Guatemala, donde hay responsables de casos de alto impacto, que sencillamente salen como si absolutamente nada hubiera pasado”.
La reforma del Estado permitiría que, a criterio del Presidente, se reforme el sistema judicial, y con ello ponerle freno a situaciones como la del ex Fiscal.
A MEDIO TÉRMINO
El documento base de reforma que planteará el Ejecutivo, se tendría a finales de esta semana, para presentarlo al gabinete, para luego discutir y analizar el tema con otros sectores a fin de lograr acuerdos en relación al Estado de Guatemala con visión para el año 2030, según informó el mandatario.
El Presidente descartó que la reforma plantee el tema de la reelección presidencial. Sin embargo, lo que sí sería un hecho, es el tema político, en el que destacó que se propondrá que el número de diputados sea fijo, porque según indicó, “no queremos que sigan creciendo –en número– los diputados”.
La elección de representantes al Congreso de la República, sería a mitad de cada periodo presidencial, cuya renovación sería parcial y se limitaría el número de reelecciones de cada diputado.
Por otro lado, según el mandatario, con la reforma que se plantee, se limitaría el transfuguismo parlamentario, pues la forma de elección se “personaliza”, con lo cual se evitaría “la irresponsabilidad que hemos visto de parte de los diputados, donde no les importa tener tres meses parado el Congreso”, con todos los costos que eso conlleva, que según Pérez Molina, son más de Q70 millones.
Adicional a esto, otra propuesta sería que los gobernadores sean electos en cada departamento y dejar que sean nombrados por el Presidente.