Los valores morales y éticos son los que nos enseñan a que nuestro comportamiento sea digno de admiración, tanto para nuestra familia como para la sociedad. Una persona con valores bien cimentados es aquella que dignifica los actos diarios de la vida y es un gran ejemplo, para aquellos que se han vuelto déspotas y los han tirado a la basura.

Cuando se pierden los valores, el hombre se vuelve débil y esto hace que lo lleve a cometer toda clase de vejaciones sin importarle a quién se lleva por delante – Una persona corrupta es consecuencia de ello- se vale del poder que ha adquirido para sembrar el mal. A este sujeto, no le importa los señalamientos que se le puedan hacer ya que se olvidó de la ética. Para este tipo de persona, lo que importa es tener el poder y hacerse de las suyas, aquí­ se cumple lo de el fin justifica los medios.

Ejemplos, tenemos muchí­simos aquí­ en Guatemala ya sea contra la Prensa o personas honorables que en ninguna momento pierden su dignidad y sus valores morales y éticos, como sucedió con el empresario judí­o-guatemalteco el señor Musa y su hija que fueron brutalmente asesinados y aún no se esclarece su muerte.

La falta de valores se ha perdido en muchos campos de la vida. En nuestro paí­s pasan tantas cosas que desmoralizan aquellos que luchan por mantenerse en una lí­nea recta. Un ejemplo sucedió hace unos dí­as y lo comentó porque es muy importante para EMETRA.

Con mi cuñado í­bamos saliendo del Periférico para encaminarnos a la Avenida Elena de la zona 3, cuando un taxista por querer adelantarse, se pasó llevando el retrovisor del carro. Le seguimos y le obligamos a parar. El taxista salió muy enojado y amenazando con un celular nos dijo: «Mi primo es inspector de EMETRA y ahorita mismo lo llamo para que los joda, ya que me ha dicho que cuando tenga un problema así­, le avise para multar a quien me esté fregando.

Mi cuñado lo tomó del cuello y le dijo: por mí­ podés ser hermano del presidente o del rey, yo lo que quiero es que me pagués lo que hiciste con el retrovisor, al momento que le quitaba el celular y se lo tiraba por los suelos. El tipo se asustó y pagó inmediatamente. Si en verdad era cierto lo del primo de EMETRA de verdad que estamos jodidos, aunque esto no es de extrañar dado el tema que estamos tratando.

Al perder nuestros valores, la corrupción se agigante en la persona en sus diferentes campos, el chantaje se da a todas luces donde la compra y venta pierde todo compromiso de responsabilidad.

El sujeto corrupto teje su tela como la araña para atrapar a sus ví­ctimas sin importarle quién puede ser. Hoy por hoy miramos tantos sujetos que han lanzado sus valores por los suelos, el poder los vuelve corruptos y el que sufre las consecuencias es el ciudadano honorable que trabaja y se mantiene incólume a sus actos en el diario vivir.

Cuando un gobierno se debilita, es la oportunidad del hombre sin valores, de hacerse de las suyas, al no encontrar eco de persecución. El actuar indiferente y hacerse de oí­dos sordos por parte de las autoridades que son garantes de la seguridad de las personas, hacen que se les facilite las cosas a aquellos que con más ganas tiran sus valores morales y éticos a la basura.

En Guatemala la impunidad camina de la mano de la justicia y así­ continuará porque en las altas esferas ya ni conocen que es la moral y la ética- por supuesto que aún hay gente honorable y estos son los que salvan lo poco que aún tenemos de bueno en nuestro paí­s.