Peña Nieto a Cuba en busca nuevo acercamiento


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Enrique Peña Nieto no ha estado en Cuba como presidente de México, pero su primera visita oficial será un encuentro entre viejos conocidos que esperan renovar los fuertes vínculos que iniciaron cuando su Partido Revolucionario Institucional respaldó a La Habana desde el triunfo de la revolución en 1959.

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Por E. EDUARDO CASTILLO, MÉXICO Agencia AP

México espera que la visita sirva para afianzar el relanzamiento de las relaciones que ambos gobiernos comenzaron hace unos meses tras una década en la que los dos países enfrentaron altibajos y enfriamientos con los anteriores gobiernos del conservador Partido Acción Nacional.

«Hay nexos muy fuertes entre lo que es el PRI como institución partidaria y todo ese proceso histórico que también gestó el proceso de revolución en Cuba», dijo Jesús Valdés, académico de la Universidad Iberoamericana. «Desde 1959 hasta que dejó de ser el PRI el gobierno en el poder, las relaciones entre los presidentes fue muy buena», añadió.

Salvo durante el gobierno del presidente Ernesto Zedillo (1994-2000), todos los gobiernos del PRI en México posteriores a la revolución cubana mantuvieron una relación bilateral basada en una relación de respeto a los asuntos internos de la isla, algo que también La Habana aplicó.

El gobierno de Peña Nieto parece encaminado a retomar esa política de respeto a los asuntos de Cuba como guía de sus relaciones, algo que se rompió con la llegada al poder en 2000 del primer mandatario emanado de la oposición: Vicente Fox (2000-2006), cuya administración tuvo rispideces tras pronunciarse en torno a temas internos como los derechos humanos.

La subsecretaria para América Latina de la Cancillería mexicana, Vanessa Rubio, expresó que los derechos humanos no serán un tema de la visita presidencial, la cual se enfocará en la mejoría de las relaciones en materia económica, comercial, turística y de cooperación, además de intercambiar experiencias en torno a las reformas que tanto México como Cuba han emprendido.

«México no va a tener un tema de promoción de derechos humanos señalando a uno, dos ni a tres países… México será respetuoso de lo que cada país tenga como contexto y como prioridades en lo que a derechos humanos se refiere», añadió.

Peña Nieto estará en Cuba el 28 y 29 de enero, primero para participar en la II cumbre presidencial de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y del Caribe (CELAC) y luego realizar la visita oficial, durante la cual se encontrará con el presidente Raúl Castro.

El académico Valdés dijo que durante los gobiernos del PRI «ni México se ha metido en los asuntos de Cuba ni Cuba se ha metido en los asuntos internos de México». Recordó que incluso cuando hubo brotes guerrilleros en las décadas de 1960 y 1970, el entonces régimen de Fidel Castro no los apoyó, como sí lo hizo con otros movimientos en Latinoamérica.

Para Cuba, esa relación le permitió tener a través de México una relación indirecta con otros países de la región, incluido Estados Unidos, añadió Valdés.

De hecho, México fue el único país de Latinoamérica que no cortó relaciones con Cuba tras el triunfo de la revolución y defendió a la isla durante décadas en los foros internacionales.

Pero ese trato se acabó y llegó a su peor nivel tras el arribo al poder de Fox. Uno de los capítulos más tensos ocurrió en marzo del 2002 cuando Fidel Castro hizo pública una conversación en la que Fox le pidió abandonar una cumbre en México para no incomodar al entonces presidente estadounidense George W. Bush.

Peña Nieto y Raúl Castro se encontraron hace un año en Chile, en el marco de la primera cumbre de la CELAC, e instruyeron a sus gobiernos a fortalecer su relación. Funcionarios de ambos gobiernos se encontraron en noviembre de 2013 México y firmaron ocho acuerdos en áreas como turismo, asistencia jurídica y educación, además de la ampliación de un acuerdo económico bilateral.