Pedirán testimonio de 70 agentes de seguridad


El PDH Sergio Morales busca hacer comparecer a policiales que pudieron tener información de las condiciones en que falleció el  campesino Mario Caal.

El procurador de los derechos humanos, Sergio Morales, anunció que tomará la declaración a 70 efectivos de las fuerzas de seguridad que participaron de los enfrentamientos ocurridos el pasado 15 de marzo en Livingston, Izabal, donde falleció el campesino Mario Caal.

Mario Cordero
mcordero@lahora.com.gt

Morales hizo el anuncio público esta mañana y señaló que también estarí­a conversando con los testigos y las personas implicadas en los altercados para determinar en qué forma murió el campesino.

El magistrado de conciencia expuso que existen altas probabilidades de que Caal haya fallecido por el ataque de un grupo de efectivos armados, debido a que en el informe de la necropsia practicado por el del Instituto de Ciencias Forenses se determinó que la causa que originó su muerte fue un golpe contuso que recibió en el costado izquierdo del abdomen.

El informe revela que el golpe rompió las costillas del campesino, además de producir daños en el estómago y pulmones, según indicó Morales; en consecuencia el médico forense también se estarí­a reuniendo con Morales para informarle de los pormenores de la necropsia practicada al cuerpo del fallecido.

Inicia interrogatorio

El interrogatorio de los 70 policí­as iniciará mañana en la PDH; el procurador dijo que tomarí­a las declaraciones en grupos de 10 efectivos para confrontar sus respuestas con la investigación que realizan los delegados pro derechos humanos.

La «investigación es bastante completa y avanzada», relató Morales, por lo que esperarí­a tener más información pronto para determinar quiénes fueron los responsables de la muerte de Caal durante los conflictos agrarios.

En el mismo caso, la PDH también investiga las acciones implementadas en esa oportunidad por las autoridades para conseguir la liberación de l4 turistas belgas y dos guatemaltecos que se encontraban retenidos por un grupo de campesinos.