Estados Unidos determinó que requerirá una segunda prueba de ADN a los niños guatemaltecos que quieran ser adoptados por ciudadanos norteamericanos ante irregularidades en los procesos, los cuales generan unos 200 millones de dólares anuales.
«La Embajada de los Estados Unidos en Guatemala requerirá una segunda prueba de ADN para verificar que el niño adoptado para quien se solicita la visa de inmigrante, es el mismo niño vinculado al inicio del proceso de adopción con la madre biológica», detalló la sede diplomática en un comunicado.
De acuerdo con la nota de prensa, la decisión se implementará a partir del lunes «en respuesta a preocupaciones sobre el proceso de adopción sin regulación en Guatemala».
Explicó que la embajada ya requiere la comparación del ADN entre una madre que cede sus derechos y un potencial niño adoptivo, como parte del proceso de la visa de inmigrante para los niños guatemaltecos adoptados por ciudadanos estadounidenses.
«Este nuevo proceso será aplicado a los casos de adopción que hayan sido concluidos por las autoridades de Guatemala y sometidos a la Embajada», agrega.
«Debido a preocupaciones sobre el proceso de adopción guatemalteco, el gobierno de los Estados Unidos aplica un extraordinario nivel de escrutinio a los casos de adopción en este país», afirma.
Organizaciones sociales de Guatemala han expresado su preocupación por el aumento de robo de niños, los cuales se presume son para darlos en adopciones irregulares, toda vez que el negocio deja unos 200 millones de dólares anualmente.
Cifras de la Procuraduría Nacional de la Nación indican que anualmente autoriza más de 4.000 adopciones, un 95% a ciudadanos estadounidense.