Paz infinita


César Guzmán
cesarguzman@yahoo.com

Hoy voy a recorrer una pradera donde las flores son bellas y las mariposas vuelan alegres.

El sol me guiará en ese recorrido y me mostrará la perfección del paisaje y la sencillez de un arbusto florecido.

Los pájaros volarán con total libertad sobre las nubes plateadas y entonarán un canto mágico que hable del amor.

Un cristalino manantial aliviará mi sed luego del largo camino, y podré descansar mi fatigado cuerpo en sus orillas.

El cielo me regalará su luz más radiante y mi alma se llenará de alegrí­a por esta paz infinita que reinará a mi alrededor.

¡Y mientras camine seré feliz porque Dios caminará siempre a mi lado!