El Parlamento ruso aprobó hoy una amnistía que permitirá liberar a unos 25.000 presos y encausados, entre ellos miles de críticos del presidente Vladimir Putin, cuando faltan menos de dos meses para los Juegos Olímpicos de invierno de Sochi.
La Duma aprobó por unanimidad la medida, la primera de esta envergadura en más de una década, en tercera y última lectura. Entre los beneficiados estarán las dos integrantes de la banda punk Pussy Riot que fueron condenadas a dos años en un campo de trabajo por vandalismo e incitación al odio religioso.
Nadeshda Tolokonnikova (24) y Maria Aliojina (25) tienen hijos pequeños, una de las condiciones mencionadas explícitamente en la ley. Su condena se cumple a principios de marzo de 2014.
También se prevé que se retire la acusación por vandalismo contra los 30 activistas de la organización ecologista Greenpeace, entre ellos dos argentinos y una brasileña, que intentaron subir en septiembre a una plataforma petrolera del Ártico para protestar por el daño al medio ambiente.
El proyecto fue presentado al Parlamento por el propio Putin. Poco antes de la votación decisiva, la Duma amplió la medida a otros presos políticos. El perdón alcanzará a quienes participaron en una protesta con disturbios el 6 de mayo de 2012, el día en que Putin asumió su tercer mandato.
Sin embargo, sí seguirán siendo perseguidos los organizadores de ese tipo de protestas. La organización de derechos humanos Amnistía Internacional (AI) volvió a exigir la liberación de todos los 27 acusados por esas manifestaciones. Sin embargo, la Duma Estatal rechazó esta petición.
Según la Constitución rusa, el parlamento tenía que aprobar la amnistía. Entrará en vigor en cuanto se publique en el diario gubernamental «Rossiyskaya Gazeta», probablemente mañana jueves. Las autoridades tienen luego seis meses de plazo para ponerla en práctica.
Los observadores consideraron hoy que la amnistía es una concesión a occidente poco antes del inicio de los Juegos Olímpicos el 7 de febrero. Defensores de los derechos humanos y políticos occidentales habían exigido la liberación de presos políticos precisamente de cara a la cita deportiva.
«Este decreto no sustituye a un sistema de justicia efectivo e independiente», criticó AI.
El perdón no se aplica al crítico más acérrimo de Putin, el ex empresario petrolero Mijail Jodorkovski, que se encuentra en prisión desde hace diez años, ni al opositor Alexei Navalny, condenado a cinco años de trabajos forzados en suspenso. El motivo oficial de la amnistía es el vigésimo aniversario de la Constitución rusa, que se cumplió el 12 de diciembre.