El Partido de Avanzada Nacional, PAN, una de las agrupaciones polí­ticas más antiguas del paí­s, estará representado en el próximo Congreso por 3 diputados, muy lejos de los 17 que tení­a en la legislatura anterior y mucho más, de los 43 que tení­a en el 2000. Carlos Yat, diputado reelecto, dijo a Visión Electoral que este resultado se debió a que «el sector privado que tradicionalmente financia los partidos» les negó el respaldo. Esta situación llevó al PAN a cambiar tres veces de candidato presidencial, de Luis Flores Asturias a Francisco Arrendono y de éste a Rodolfo Castañeda, siempre buscando «financiamiento para la campaña». Yat no le ve mucho futuro al Diálogo Nacional convocado por el Presidente Electo porque «lamentablemente la mayorí­a de los partidos en Guatemala son electoreros». A continuación presentamos un resumen de la entrevista de Visión Electoral con Carlos Yat, diputado reelecto del PAN.

¿Cómo valora el impacto de las reformas electorales en este proceso y los resultados que se dieron?

El proceso electoral se realizó como la Comisión de Asuntos Electorales del Congreso previó que deberí­a de ser. Las reformas que se hicieron relacionadas con la descentralización del voto lograron efectos muy positivos. Lo demuestra el hecho que la gran mayorí­a de las áreas comunitarias que no lograban votar por falta de transporte, esta vez sí­ lo hicieron. El porcentaje de abstencionismo bajó ostensiblemente y afortunadamente el Tribunal Supremo Electoral previó también esto. El paso del tiempo nos ha permitido visualizar que fue un éxito y que deben irse haciendo otras reformas (?) La elección en un gran porcentaje la decidió el área rural, como efecto de la descentralización, de otra manera, si la Ley Electoral y de Partidos Polí­ticos no hubiese sido reformada, estoy seguro que el resultado de las elecciones habrí­a hecho surgir un ganador diferente.

El PAN tuvo una reducción muy importante de votación y quedó solo con 3 diputados. ¿A qué factores atribuye usted este resultado?

Estamos conscientes que los frutos de las elecciones pasadas no son positivos para nuestro partido. Interiormente en la organización hemos hechos nuestros propios análisis, en el sentido de todos los factores negativos que tuvimos. El no tener el financiamiento del sector que tradicionalmente apoya a los partidos, nos lo negaron cuando tuvimos un excelente candidato como fue Luis Flores Asturias. Con la salida de él, por la manifestación del sector que no lo iban a apoyar económicamente, tuvimos que optar Francisco Arredondo que desafortunadamente en principio ofreció recursos económicos propios para sacar una campaña polí­tica decorosa, finalmente manifestó que no tení­a los recursos, pues hubo que recurrir a una tercera candidatura con Rodolfo Castañeda, que desafortunadamente presentó más debilidades que fortalezas para la campaña. Por supuesto, nosotros argumentamos que esas son las debilidades que nos llevaron a una derrota, no catastrófica, pero sí­ muy grande en relación al prestigio, al trabajo y a la organización que el PAN tiene.

¿Cómo valora el PAN la convocatoria al Diálogo Nacional del presidente electo ílvaro Colom y que perspectivas ven para este proceso?

El fruto de la convocatoria que hizo el presidente electo, ílvaro Colom, tendrá cohesión interpartidaria durante los primeros seis meses de su Gobierno. En la medida en que transcurra el tiempo, visualizo que los partidos polí­ticos tienen una agenda propia, que no todos están en la disposición de apoyar los errores en que vaya incurriendo el Ejecutivo, y se irán separando para cumplir su propia agenda y para preparar su mesa para las próximas elecciones. Desafortunadamente, la mayorí­a de los partidos polí­ticos en Guatemala son electoreros, salvo que algún partido en particular visualice tener algún candidato bien posicionado en la mente de la ciudadaní­a, necesitará darle mantenimiento durante los próximos cuatro años. Aún con buena voluntad, los partidos más cercanos o muy afines a la UNE, también se apartarán del acuerdo para llevar su propia lí­nea estratégica.

El PAN no se definirá especí­ficamente en apoyo a alguno de los dos principales partidos polí­ticos. El PAN se ha caracterizado en los últimos años por ser un contribuyente a la gobernabilidad, no tomamos un papel protagónico de oponernos sin razón. Tampoco apoyamos a otro partido para ir en contra del Gobierno. No es una postura gallo o gallina. Entendemos que estamos en el Congreso para buscar el mejoramiento y el desarrollo del paí­s.

¿Cuáles serán las prioridades para el PAN en el Congreso?

El Desarrollo Rural será una prioridad, esperamos encontrar eco positivo para discutirlo y tratar de aprobarlo. El PAN presentó una iniciativa de ley, que se refiere al Instituto de Fomento a la Economí­a Indí­gena y Desarrollo Rural. Vamos a impulsar dos nuevas leyes que vienen a fortalecer el Registro de Información Catastral. Una que ya está en proceso de discusión, ya pasó en primera lectura, que es una ley que se refiere al hecho que hay muchas fincas que fueron registradas y siguen registradas a nombre de los antiguos dueños, a pesar que han pasado a varias personas, pero que esos trasladados no han sido inscritos en el Registro de la Propiedad, y no hay una ley para establecer qué procedimiento se lleva. Vamos a impulsar la Ley de Regularización, también complementaria para el catastro.

Un tema clave será la polí­tica fiscal. ¿Qué postura tendrá el PAN?

Ningún gobierno va a encontrar en el incremento de los impuestos un paliativo para tener más dinero para hacer gastos o inversión. Somos un pueblo pobre en un paí­s rico. Desafortunadamente, la desigualdad que existe en nuestro paí­s, no permite estar pensando en mayores impuestos, porque efectivamente la industria, el comercio y todo el poder económico están en pocas manos, y por eso argumentan con razón, que ellos son los que pagan los impuestos, pero no sólo ellos. La gran mayorí­a que es la empobrecida, la gente que trabaja en el campo y no tiene instrucción, también paga impuestos, en la medida de sus posibilidades. Básicamente, lo que necesita hacer un Gobierno es ampliar la base tributaria. Hay mucha evasión fiscal por la falta de una organización que localice dónde se evaden los impuestos.