Pamela Anderson anunció ayer que se divorcia del rockero Kid Rock con quien se casó con bombos y platillos en Saint-Tropez en agosto pasado, porque tras cuatro meses juntos es «imposible», dijo en su página Web.
A principios de agosto la pareja había organizado una ceremonia para celebrar el enlace en el balneario francés de Saint-Tropez y una semana después se dieron el «sí» ante un juez en Detroit (noreste de Estados Unidos) para luego convocar a otra fiesta de bodas en Beverly Hills.
Pero tantas celebraciones no ayudaron a prolongar la unión y antes de cumplir los cinco meses juntos se vino el divorcio: «Sí, es verdad. Desgraciadamente es imposible», confirmó la voluptuosa chica de «Baywatch» que en la actualidad aparece en la exitosa película «Borat».
Anderson presentó la demanda de divorcio ante la Corte Superior de Los íngeles alegando «diferencias irreconciliables», indicó el sitio especializado en las estrellas TMZ.com, donde también precisaron que los abogados del roquero presentaron su demanda del divorcio.
«No fue un día de Acción de Gracias feliz», indicó por su parte la portavoz de Anderson Tracy Nguyen a la revista People.
En una ceremonia que bautizaron como «la más romántica de todos los tiempos», la ex modelo de Playboy, considerada el «sex-symbol» de los años 1990 y Kid Rock, de 35 años, celebraron su unión en agosto en un yate sobre las aguas de Saint Tropez, en el sur de Francia, ante la presencia de varias estrellas invitadas.