Como los resultados de los exámenes internacionales son muy buenos, el sistema educativo de Finlandia es mentado a menudo. Finlandia es del tamaño del Estado de Kentucky, Estados Unidos, con una población muy parecida, sin grandes diferencias sociales.
Algunos de los factores que hacen que Finlandia tenga tanto éxito, pero que generalmente no son mencionados son los siguientes: 1. En los años de la década de 1970 el gobierno determinó una nueva visión (transformación) de su sistema escolar. 2. Establecieron que las oportunidades de acceso a una excelente educación fueran para todos. Sin embargo, estaban conscientes de que para lograr esa meta, la equidad, primero tenían que implementar cambios fundamentales en su sistema escolar. Sabían que esas ideas de una nueva visión, transformación, hoy día son muy complicados y necesitan de la colaboración de personas (equipo) convencidas de esa habilidad para que realmente el resultado de esa nueva visión resultara en innovaciones en el sistema escolar que representa el conocimiento colectivo de ese grupo de profesionales.
En discusiones sobre temas educativos, siempre se escucha que uno de los factores de éxito de Finlandia, descansa en la preparación profesional de los maestros. En ese sentido, y como resultado de esa preparación académica, el sistema da más autonomía a los maestros para que enseñen tomando en cuenta las necesidades de los alumnos, más que un sistema que depende de órdenes de arriba hacia abajo y un sistema que enfatiza los exámenes estandarizados.
El doctor Pasi Sohlberg dice que en el sistema educativo, “Si no hay exámenes estandarizados, los alumnos pueden enfocar su atención en un aprendizaje real y los maestros no tendrán que preocuparse de preparar a sus alumnos para los exámenes (teach to the test)”.
El currículo de los diferentes niveles incluye como parte de la lección, no como una adición, el “movimiento” del cuerpo, cuyo mayor resultado es mejorar la actividad del cerebro y por lo tanto en aprendizaje del alumno. Además, el currículo enfatiza el arte y las manualidades para proveer experiencias de “hands on”, más proyectos que requieran resolver problemas y donde aplican el pensamiento crítico.
Las instalaciones físicas nuevas, tienen ambientes amplios con ventanas grandes y no aulas básicamente cerradas y con escritorios arreglados en filas. La educación en su totalidad, es un sistema abierto no cerrado. Hoy día se toma este modelo de sistema abierto como una de las bases principales para la transformación del sistema educativo.
El éxito de un sistema, sea cual sea, consta de muchos elementos “escondidos” pero que son fundamentales; este es el caso del sistema escolar de Finlandia. Tomaron esos elementos muy propios de ellos, “escondidos”, los analizaron y los incorporaron a su sistema de educación.
¿Por qué en Guatemala insistimos en copiar modelos y los “adaptamos” a nuestra realidad? Es hora de transformar y diseñar NUESTRO propio sistema. Guatemala, al igual que Finlandia, tiene excelentes educadores que pueden formar equipo para esta transformación.