Tres décadas después del brutal asesinato del líder estudiantil Oliverio Castañeda de León, el Gobierno de la República entregó la Orden del Quetzal, en grado de Gran Oficial, a su memoria, en forma póstuma. La familia del mártir recibió la condecoración.
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ílvaro Colom, presidente de Guatemala, fue el responsable de entregar la condecoración a la familia Castañeda de León; los miembros de ésta aún recuerdan con lágrimas en los ojos a su familiar, quien se distinguió por ser un líder con gran poder de convocatoria y por ser una de las figuras clave de la resistencia civil durante los gobiernos de represión militar.
Gustavo Castañeda, hermano de Oliverio, agradeció al Gobierno por el reconocimiento póstumo otorgado e invitó al público a conocer más acerca de la historia de represión en el país.
Asimismo, se entregaron reconocimientos a líderes estudiantiles contemporáneos a Castañeda de León, dentro de los cuales se encuentra la activista pro derechos humanos y de seguridad democrática, Iduvina Hernández.
La Orden del Quetzal póstuma a Oliverio Castañeda forma parte de una serie de actividades que el Gobierno de la República realiza para celebrar un aniversario más de la Revolución de 1944.
Castañeda de León fue asesinado en una marcha que festejaba, precisamente, la gesta heroica de Octubre; el 20 de este mes, se habrán cumplido 30 años de su desaparición.
Historia
Oliverio Castañeda de León fue uno de los personajes emblemáticos que inició la resistencia de la sociedad civil ante las imposiciones del Gobierno del general Romeo Lucas García en 1978.
Durante su participación en la dirigencia de la Asociación de Estudiantes Universitarios de la Universidad de San Carlos, Castañeda de León impulsó una manifestación en contra del aumento al pasaje del servicio de transporte público, la cual tuvo resultados positivos para la población.
Según detalla el informe «Guatemala: Memoria del Silencio», de la Comisión para el Esclarecimiento Histórico (CEH), Castañeda de León fue asesinado meses después, el 20 de octubre de 1978, luego de participar en una manifestación para conmemorar la Revolución de 1944.
«Un hombre sale desde la puerta trasera de un carro (…) y con una ametralladora abre fuego sobre Oliverio», relata el informe. Sin embargo, pese a la denuncia realizada en este documento, la autoría de este crimen aún sigue sin ser investigado, permaneciendo en la total impunidad.
«Pese al compromiso asumido públicamente por las autoridades, el Estado no realizó una investigación seria para tratar de esclarecer el caso. Los responsables de la persecución penal omitieron de forma deliberada seguir aquellas pistas que indicaban la participación de agentes estatales o se conformaron con referencias dudosas», refiere el informe del CEH.
Castañeda estudió en la Facultad de Economía de la Usac en 1975. Desde su ingreso, demostró una gran sensibilidad social, además de ser uno de los mejores estudiantes de su generación.
Así llegó a ser miembro de la Asociación de Estudiantes Universitarios, de la cual fungió como secretario general a partir del 22 de mayo de 1978. Desde ese puesto, se convirtió en uno de los más importantes líderes de la sociedad civil.
Sin embargo, fue por esa misma razón que provocó molestias en contra del gobierno represor de Romeo Lucas García; durante el régimen militar de éste, se cometieron los más lamentables asesinatos en contra de los líderes de la sociedad civil, entre éstos, el de Oliverio Castañeda.