La orden de captura contra Alfonso Portillo, ex presidente de la República de Guatemala, podrí­a cambiar de giro el liderazgo en los feudos polí­ticos que mantení­a en Zacapa y Jalapa, departamentos que ahora quedarí­an sin caudillo, opinó Aní­bal Garcí­a, diputado independiente.

Los últimos meses de 2009, la opinión pública conoció las intenciones que surgieron sobre la participación del ex presidente de la república durante las próximas elecciones generales.

Así­ ya no se podrí­an abrir más esos espacios, que han mantenido en conflicto a dos proyectos, uno económico tradicional frente a un grupo económico emergente que vienen buscando consolidarse en el sistema, agregó Garcí­a.

Es importante recordar que Portillo fue cuestionado por su gobierno populista gobernando en nombre de los pobres, «ya no hay de que extrañarse», enfatizó el parlamentario.

Si Estados Unidos tiene pruebas y testigos lo tendrá que demostrar, agregó, sosteniendo que ya es hora que los mandatarios de la República se sometan y no cometan más actos de corrupción.

Nineth Montenegro, de Encuentro por Guatemala, cree que la situación de la desaparición de Portillo se debe que por primera vez empieza a avanzar con la fiscalización que se efectuó en el Ministerio de la Defensa y el Estado Mayor de la Defensa.

Recordó que recién llegada al Congreso durante 2000 empezó a fiscalizar los programas de la galleta escolar y la repartición de leche que se efectuaba a través de la cartera castrense y no se licitaba.

La insistente fiscalización llevó a encontrar que durante el gobierno de Alfonso Portillo se utilizaron empresas de cartón que presentaban una faceta para la distribución de alimentos escolares, pero en realidad fueron multifacéticas porque se dedicaban a construcción y otros negocios.

Consultados otros diputados, tocan con cautela el tema. Luis Fernando Pérez, jefe del bloque FRG, califica que la orden de captura contra Portillo «es una situación difí­cil para el ex mandatario», pero alegó que mientras no se respete el debido proceso no habrá paz en Guatemala.

Roberto Alejos, presidente del Congreso, no se atreve a opinar si hubo o no fuga de información, la que influyera en el fracaso de las autoridades que hicieron el intento de capturar al ex presidente Portillo tanto en Zacapa como en la capital.

Otros parlamentarios, se limitaron a decir que no son abogados para emitir una opinión y que el caso está en manos de los órganos jurisdiccionales.