La opositora birmana Aung San Suu Kyi se declaró hoy «insatisfecha» de las discusiones con el régimen militar, que en más de tres meses no dieron resultados, informó un portavoz de su partido tras reunirse con ella.
«Aung San Suu Kyi no está satisfecha de sus encuentros con el ministro (de la junta encargado de entablar el diálogo con ella), principalmente porque no existe un calendario» en este proceso, declaró a la prensa Nyan Win, portavoz de la Liga Nacional para la Democracia (LND).
Suu Kyi, de 62 años, premio Nobel de la Paz, ha vivido en arresto domiciliario la mayor parte de los últimos 18 años.
Hoy se la autorizó a salir de su residencia para reunirse unos 90 minutos con ocho responsables de su partido en un edificio gubernamental.
El mismo día, la líder opositora se encontró de nuevo durante 45 minutos con el ministro de Trabajo Aung Kyi, que fue encargado por la junta de entrablar el diálogo con ella en octubre, tras la violenta represión de un movimiento de protesta popular encabezado por los monjes budistas en septiembre.
En total, la premio Nobel de la Paz se ha reunido con Aung Kyi en cinco ocasiones, pero no se ha anunciado ningún resultado de estas conversaciones. Del mismo modo, no se fijó la fecha de su próximo encuentro, según el portavoz de la LND.
Nyan Win leyó una declaración de Suu Kyi en la que ésta decía a sus seguidores que aprecia sus sacrificios.
«Aprecio los esfuerzos de los miembros de la LND y os pido que os mantengais unidos como partido», afirmó.
La líder opositora citó asimismo a su padre, el héroe de la independencia de Birmania Aung San, al decirle al pueblo: «esperad lo mejor y preparaos para lo peor».
«Debemos ser pacientes, hemos hecho sacrificios durante muchos años», recordó.
«No quiero dar falsas esperanzas a la población. Ya diré más en el momento apropiado», agregó. «Hasta ahora no hemos recibido ningún mensaje claro del gobierno», precisó Suu Kyi.
Birmania ha estado gobernada por sucesivas juntas militares desde 1962.
Por primera vez desde el inicio de los contactos con el ministro hace tres meses, Suu Kyi habló de la «hoja de ruta» defendida por el régimen para llevar al país hacia la democracia y que Occidente considera una farsa.
«La hoja de ruta en siete etapas diseñada por el gobierno debería ser menos discriminatoria e incluir a todas las partes», afirmó.
La primera etapa de esta «hoja de ruta» fue una Convención Nacional que adoptó el pasado septiembre las grandes líneas de una nueva Constitución, tras más de una década de discusiones. La LND boicoteó las conversaciones para protestar contra la detención de su dirigente.
La junta afirma que esta «hoja de ruta» desembocará en elecciones, tras la aprobación de la Constitución por referéndum. No obstante, no se fijó ningún calendario.
Tras la violenta represión de septiembre, el régimen militar ha dado una de cal y otra de arena, autorizando en dos ocasiones el viaje de un mediador de la ONU para favorecer el diálogo con la oposición, al tiempo que continuaba con las detenciones de disidentes y aumentaba los controles sobre la población.