La oposición en Nicaragua continúa exigiendo la revisión de los resultados electorales
La oposición de Nicaragua advirtió hoy al gobierno de Daniel Ortega que no le tiene «miedo» y que seguirá luchando por lograr la revisión de los resultados de los comicios municipales, que le dieron el triunfo al oficialismo, al considerarlos fraudulentos.
«No nos van a detener (..) Aquí nadie tiene miedo», desafió el líder opositor y candidato a la alcaldía de Managua, Eduardo Montealegre.
El político hizo el anunció tras las movilizaciones realizadas esta semana por el gobernante Frente Sandinista (FSLN, izquierda) para sofocar cualquier intento de la oposición agrupada en el Partido Liberal Constitucionalista (PLC, derecha) de salir a las calles a protestar contra la victoria alcanzada por el oficialismo en las elecciones municipales del pasado 9 de noviembre.
Miles de simpatizantes sandinistas armados con piedras, garrotes y bombas artesanales sitiaron ayer a cientos de opositores cuando comenzaban a reunirse en el centro de Managua para emprender una marcha de protesta contra un presunto fraude ocurrido en las municipales.
Los sandinistas, entre quienes la oposición y la Prensa observó a muchos pandilleros, lanzaron piedras y morteros artesanales contra todo lo que encontraron a su paso: vehículos, ventanas, puertas de residencias y atacaron a puñetazos y con piedras a los ciudadanos que querían unirse a la marcha.
«Eso fue una expresión más de la intolerancia y la violencia del orteguismo (seguidores de Ortega) que quieren coartar la libertad de movilización de la misma manera en que coartaron el voto de los ciudadanos», cuestionó el diputado de la oposición liberal, José Pallais.
En tanto, Montealegre aseguró que la represión no los iba a «intimidar» y acusó a Ortega de ser «un cobarde por enviar a un montón de vagos» a reprimirlos y provocar disturbios que han sumido en caos al país desde hace una semana.
Esta es la segunda vez que los sandinista neutralizan una marcha del PLC, tras los violentos disturbios ocurridos el pasado domingo en el occidental departamento de León.
Las dos protestas fueron suspendidas por la dirigencia liberal para evitar un derramamiento de sangre, sin que ello evitara que ambas dejaran una decena de heridos, entre ellos cuatro periodistas de medios nacionales y extranjeros.
La dirigencia del FSLN justificó la movilización de sus bases a una supuesta celebración del triunfo de su partido en 105 de los 146 municipios del país y para exigir al Consejo Supremo Electoral (CSE) la proclamación de los candidatos electos para alcaldes, vicealcaldes y concejales.
El PLC desconoció sin embargo el triunfo sandinista, alegando que las actas electorales de cerca de 12 mil Juntas de Votación en poder de sur fiscales, no coinciden con los resultados divulgados por el CSE, y que el proceso estuvo supuestamente lleno de anomalías.
En esa dirección, el PLC presentó el lunes un recurso de revisión ante el CSE para pedir la revisión total de los resultados electorales, como parte de las acciones legales que buscan anular los votos del FSLN.
El vocero del CSE, Félix Navarrete, informó que los magistrados podrían resolver los recursos el próximo lunes, para luego proclamar a los electores, aunque la fecha tope para formalizar la lista de ganadores vence el 5 de diciembre.
De manera paralela el PLC se apresta a introducir al Congreso un proyecto de ley que busca anular los comicios, ante la negativa del tribunal electoral de escuchar y resolver las anomalías denunciadas en torno al proceso.
La iniciativa, que sería presentada la víspera, fue pospuesta para hoy debido a retrasos de forma en la elaboración del proyecto, afirmó el diputado Pallais.