El inicio de una investigación sobre 1,200 empresas contratistas en materia de infraestructura, es una excelente oportunidad para poder revolucionar o sepultar dos instituciones que en este año se enfrentarán a los procesos de postulación para la nominación de titulares.

El Ministerio Público ha solicitado que las empresas que conforman el listado de pendientes en la deuda flotante sean detalladamente investigadas por la Contraloría General de Cuentas de la Nación para determinar cuáles de ellas cumplieron con los procedimientos de ejecución y cuáles no.  Pero, a la vez, se menciona a los Ministros de Comunicaciones que durante los últimos períodos fueron responsables de la adjudicación de obras sin partida presupuestaria.

  Ya ni secreto es que la cartera de Comunicaciones y la asignación de obras es una de las formas tradicionales de hacer negocios en los que se pagan comisiones, se forman “sociedades” con funcionarios, etc.  El resultado es que es uno de los ministerios abanderados en la fabricación de millonarios en un país en que los ciudadanos mueren de hambre.

  Habría que ponerle una atención especial a este proceso porque será la oportunidad de que la Fiscalía demuestre que sí se puede hacer un trabajo contra la corrupción o que, simplemente, mejor enterremos cualquier esperanza de que se le ponga un alto a la mala práctica administrativa que, sencillamente, es corrupción.

  Entendemos que habrá empresas dentro de ese listado que sí hicieron su trabajo y a las que se les deberá revisar el trámite que hayan hecho para recibir la adjudicación de las obras. Pero también va siendo importante que quienes aplican a las licitaciones y demás entiendan que a estos retrasos se someterán si no verifican el cumplimiento de lo que la ley estipula para, al menos, fingir que se quiere ser transparente.

  Esta ha sido una semana en la que el tema de la corrupción tras el caso Portillo se ha mantenido en el ambiente.  La pregunta es qué se hará con exfuncionarios como los que salen mencionados en la lista para ser investigados cuando es evidente que el salto al éxito financiero que tienen después de participar en la cartera de Comunicaciones es tan desmesurado que ni en historias de telenovela se ve gente con tanta suerte.

  Ojalá que este proceso sea una nueva oportunidad para que algún corruptor y algún corrupto, ambos responsables por igual, paren en el bote para demostrarle a la gente que una pizca de esperanza nos queda.  La otra, la que siempre pasa, es que todo terminará sin novedad y los “exitosos” millonarios que han hecho gobierno se seguirán riendo de nosotros.

Minutero
A ver si encuentran faltante
en esa deuda flotante
que deja millonarios
a muchos funcionarios