El responsable estadounidense para América Latina, Arturo Valenzuela, cumple el lunes una visita de bajo perfil a Quito, donde no será recibido por el presidente Rafael Correa, quien cuestionó severamente a la petrolera Chevron y un informe de derechos humanos de la Casa Blanca.
La embajada solicitó una audiencia con Correa, pero el gobierno «ha dicho en principio que por motivos de agenda (del mandatario) no es posible», manifestó a la AFP la portavoz de la legación, Marta Youth.
«La agenda la estamos trabajando. Tengo mucho gusto de estar en Ecuador», respondió Valenzuela al ser consultado sobre un eventual encuentro con Correa.
El funcionario llegó el domingo por la noche para una visita que concluirá el martes, en medio de cuestionamientos de Correa al reciente informe anual de Washington sobre derechos humanos, que criticó el desempeño ecuatoriano en esa materia, y contra la petrolera estadounidense Chevron, a la que acusó de pretender «pulverizar» a su país.
El jefe de Estado cumplirá el lunes actividades en la provincia costera de El Oro (suroeste) y regresará en la tarde para tomar juramento a una decena de nuevos ministros, en el marco de la mayor reestructuración del gabinete en sus tres años de gobierno.
En el inicio de una gira andina de una semana, que incluirá Colombia y Perú, Valenzuela se reunirá el lunes por la tarde con estudiantes de la Universidad de Loja y dictará una conferencia sobre la política exterior de Estados Unidos hacia la región en la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso).
El martes se entrevistará con el canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, antes de partir hacia Colombia.
«Tengo muchas ilusiones de poder tener un buen diálogo con mis homólogos del gobierno de Ecuador», dijo el responsable de la diplomacia estadounidense para América Latina.
Patiño anticipó a su vez que la visita de Valenzuela es «parte de lo que podría ser la preparación de una futura reunión de cancilleres y también de una futura reunión de presidentes» de los dos países.
La Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) «planteó hace algunos meses conversar con Estados Unidos sobre temas políticos y de seguridad», añadió.
Correa gestiona un encuentro con su homólogo de Estados Unidos, Barack Obama, en calidad de presidente pro témpore de la Unasur, la cual espera de Washington explicaciones sobre el acuerdo militar que le permite el uso de siete bases militares de Colombia para la lucha contra las drogas y el terrorismo.
Venezuela, Bolivia y Ecuador rechazan ese pacto por considerar que podría desestabilizar la región.
Además el presidente ecuatoriano anunció el sábado que planteará a la Unasur crear un frente común contra las transnacionales como Chevron, a la que acusó de querer «deslegitimar a la justicia ecuatoriana» y ser una «enemiga abierta» y pretender «pulverizar» a Ecuador.
La Corte Permanente de Arbitraje (CPA) en La Haya ordenó a Quito pagar unos 700 millones de dólares a la petrolera por violar el tratado bilateral de inversiones entre Estados Unidos y Ecuador.
El Estado ecuatoriano pedirá la nulidad de ese fallo, según Correa, quien el miércoles viajará a Estados Unidos para recibir un premio de la Universidad de Illinois -donde estudió-.