Francia y Alemania lanzaron una campaña para que las principales economías del mundo impongan límites a las bonificaciones de los banqueros, una exigencia que podría dividir la próxima cumbre del G-20. La iniciativa franco-alemana fue llevada a una reunión ministerial de la Unión Europea en Bruselas ayer y se espera que sea presentada en un encuentro de ministros de Economía del G-20 en Londres mañana.