El presidente Barack Obama firmó ayer una medida para el gasto a corto plazo que evita un cierre del gobierno y repone los fondos de asistencia en casos de desastre, los cuales enfrentaban limitaciones por cuenta por una serie de tormentas, incendios y tornados.
La firma del presidente se esperaba y no sorprendió a nadie. La legislación mantiene el gobierno funcionando hasta el martes. En ese momento, los legisladores votarán sobre otra medida que mantendrá al gobierno funcionando hasta mediados de noviembre.
La medida acordada se aprobó en el Senado la noche del lunes y en la Cámara de representantes el jueves.
La legislación otorga 2.700 millones de dólares en asistencia por desastres. Los líderes del Congreso llegaron a un acuerdo al recortar 1.000 millones adicionales a la asistencia por desastres, que según varios republicanos debe ser equilibrada con un recorte en los programas de energía limpia que defienden los demócratas.