O cambiamos o nos hundimos más


«Nunca más maldeciré la tierra por culpa del hombre, pues veo que desde su infancia está inclinado al mal» Génesis 8, 21.

Carlos Asturias

Qué vergí¼enza no poder utilizar la Ruta Maya que une Cancún, Belice y Petén, el Bajo del Venado, en Melchor de Mencos, tiene más de un kilómetro de tráileres y carros atascados; con qué nueva excusa presentaremos esas negociaciones de una carretera que debiese, de acuerdo a la contratación original, estar funcionando. Claro es, nada cuesta bla, bla, bla y continuar preparando los bolsillos de los próximos candidotes a la elección de los espejitos.

Demostración 1: La pregonada funcionalidad de un departamento que se promociona a nivel mundial, obsoleta y sin respaldo alguno, Petén no es lo turí­stico que se anuncia: mientras los narcos y los económicamente potentados siguen mangoneando el erario nacional, los más pobres de peor en peor.

Demostración 2: Mientras el gobierno no tenga oficinas paralelas, que frenen las necesidades de los narcos y económicamente potentados con las necesidades de los pobres, todo será cuesta abajo; casos como la famosa finca del Ministerio de Agricultura en las márgenes del rí­o Subin, que años atrás proveí­a injertos de cí­tricos y hasta se llegaron a tener un ciento de cabezas de ganado para proporcionar a los granjeros pequeños animales para reproducción o para iniciar crianza; desaparecidos, según se comenta, murieron por el fuego cruzado entre guerrilla y Ejército, no existí­a pulso alguno para abatir al contrincante ideológico, pero esos pobres semoviente ni se meneaban, en sus corrales, ante tan atroz fuego de fusiles, ahora en poder del Ejército Nacional.

Demostración 3: La ley de adjudicación, uso y tenencia de la tierra del extinto FYDEP, brillando por su ausencia al haber derogado la funcionalidad del mismo, del cual justo es recordar que los fondos que le mantení­an eran los mismos que el departamento producí­a, ahora se recurre a la benevolencia o interés del gobernante en turno. Fincas de 200 a 400 caballerí­as a la orden del que pueda pagar los movimientos e inscripciones necesarios, no importa a qué procedimientos haya que recurrir.

Demostración 4: La finca experimental de la universidad, en donde se encontraban ya cien cí­tricos ensayando sus cosechas, ante la brillante idea de un Ciro Pera loca de la Agricultura de botarlos y sembrar Soya, ahora ni lo uno ni lo otro. En su debida oportunidad doné un torete para que se utilizara como rasero y se mezclara con vacas criollas que mejorarí­an los Hatos; se cambio por cinco novillas cachudas de Sabana, de las cuales sólo cuatro llegaron a la finca universitaria y tampoco quedó rastro alguno de las restantes. Un sistema de bombeo y riego perdiéndose inútilmente, mientras las practicas agrí­colas se continúan en el pequeño espacio que la Usac posee en Santa Elena.

Demostración 6: Los Consejos de Desarrollo deben funcionar con la representatividad de ciudadanos honestos, libremente electos, partiendo de las alcaldí­as municipales al Consejo Departamental, no más nombramientos al dedo para campaña proselitista de conveniencia del Ejecutivo, cambiamos o nos acabamos por hundir; los compromisos del Estado son en ambas direcciones.