Nuevo sitio para enriquecer uranio


La sede del reactor nuclear en la ciudad iraní­ de Bushehr. FOTO LA HORA: AFP BEHROUZ MEHRI

Irán anunció hoy que empezará a construir un nuevo sitio para enriquecer uranio en 2011, pese a las sanciones impulsadas por las potencias occidentales que temen que Teherán intente fabricar una bomba atómica.


«Acabamos de determinar el emplazamiento de diez nuevos sitios de enriquecimiento» que habrán de ser construidos, declaró Ali Akbar Salehi, jefe de la Organización Iraní­ de Energí­a Atómica (OIEA), según el sitio internet de la televisión de Estado.

«La construcción de uno de ellos se iniciará antes de fin de este año iraní­ (20 de marzo de 2011) o a principios del que viene», estimó.

El enriquecimiento de uranio ha generado una crisis entre Irán y las potencias occidentales, que temen que Teherán intente dotarse de bombas nucleares, pese a sus reiterados desmentidos.

El presidente iraní­ Mahmud Ahmadinejad habí­a anunciado el año pasado la construcción de diez plantas para enriquecer el uranio a un 20%, con vistas a su uso como combustible en un reactor nuclear de investigación médica en Teherán.

Actualmente, Irán enriquece uranio en la planta de Natanz (centro) y está construyendo una segunda planta en Fordo (suroeste de la capital iraní­).

Según Salehi, quien no indicó dónde estará la nueva planta, los sitios están siendo elegidos en lugares imposibles de ser bombardeados por aviones.

El viernes, tras anunciarse la inauguración el 21 de agosto en Buchehr (sur) de la primera central de energí­a nuclear iraní­, Estados Unidos afirmó que la puesta en marcha de esta central con ayuda de Rusia muestra una vez más que Teherán «no tiene necesidad de disponer de una capacidad de enriquecimiento».

El Consejo de Seguridad de la ONU adoptó el pasado 9 de junio una resolución que refuerza las sanciones internacionales contra Irán. Esta iniciativa fue seguida por la adopción de fuertes sanciones unilaterales por parte de Estados Unidos y la Unión Europea (UE).

Tras anunciarse las sanciones europeas, a fines de julio, Irán reafirmó su voluntad de seguir adelante con su programa nuclear, aunque se dijo dispuesto a reanudar en septiembre sus conversaciones con las grandes potencias, a las que quiere que se sumen Turquí­a y Brasil.

Sin embargo, Ahmadinejad recordó que una de las condiciones de su paí­s es conocer la postura de las potencias occidentales sobre las «bombas atómicas del régimen sionista». Las potencias occidentales «deberí­an decir si aceptan o no» el arsenal israelí­, dijo el mandatario a fines de julio.

Irán habí­a propuesto en mayo a las grandes potencias, en el marco de un acuerdo con Brasil y Turquí­a, intercambiar en territorio turco 1.200 kilos de su uranio escasamente enriquecido (al 3,5%) por 120 kilos de combustible enriquecido al 20% y destinado al reactor de investigación médica de Teherán, una iniciativa que fue ignorada por las potencias occidentales.