El nuevo servicio de música de Google Inc. ofrece un gran atractivo visual, una selección de alrededor de 18 millones de canciones comparable con servicios populares como Spotify y Rhapsody y un sinfín de listas de reproducción ordenadas por género; mucha diversión para los amantes de la música.
El servicio All Access representa el intento de Google por conseguir un mayor porcentaje del mercado de música digital a medida que más personas reproducen canciones en su teléfono móvil. Estos servicios también están destinados a atraer a los usuarios de teléfonos multiusos al sistema operativo Android de Google, donde el líder de búsquedas gana dinero con la publicidad y transacciones en su tienda de contenido digital, Google Play.
Por una cuota mensual, All Access permite escuchar toda la música que uno desea a través de una conexión a internet. También es posible descargar canciones a dispositivos móviles para reproducirlas después cuando uno no tenga teléfono móvil o acceso Wi-Fi.
En Estados Unidos hay una tarifa mensual de descuento de 8 dólares si se suscribe antes de que termine junio. Quienes se inscriban después pagarán 10 dólares al mes, la misma cantidad cobrada por sus principales competidores, Spotify y Rhapsody. De cualquier manera, el primer mes es gratis y es posible cancelar el servicio en cualquier momento. All Access trabaja en la aplicación gratuita Google Play Music para dispositivos Android y en navegadores de internet en computadoras, pero no en el iPhone. (Spotify y Rhapsody funcionan tanto en el sistema Android como en el iPhone).
Visualmente, la aplicación que probé en el teléfono multiusos Nexus 4 de Google es interesante. Google Play Music evita los despliegues llenos de listas que utilizan sus competidores, y en su lugar complementa la interfaz con fotos de los artistas junto con pequeñas animaciones, como barras ecualizadoras en movimiento, y arte del tamaño de la pantalla que se mueve lentamente hacia adelante y hacia atrás mientras se reproduce una canción.
Sin embargo, algunas de las funciones táctiles requieren mucha destreza con los dedos, una desventaja de este nuevo competidor en el mundo de la transmisión de música ilimitada.
Es posible reordenar las canciones en la fila sobre la marcha, algo que no ofrecen Spotify ni Rhapsody. Pero para ello se requiere pulsar una pestaña digital muy delgada ubicada a la izquierda del título de una canción y deslizarla hacia arriba o hacia abajo. Debido a que la pestaña es mucho más delgada que el dedo que utilizo para moverla, acabé reproduciendo canciones que sólo quería mover, o borrándolas de la lista por accidente.
El icono de opciones en cada título (tres puntos apilados uno encima del otro) también es diminuto, y provocó errores frecuentes. Esto significa reproducir una gran cantidad de canciones por accidente y borrar por error listas que me llevó tiempo crear.
No me impresionaron demasiado las recomendaciones del servicio, aunque quizá esto se deba a que no lo he usado mucho. Recomendó artistas «como Madonna», aunque en realidad no escucho a la «Chica Material». Las principales recomendaciones son las mismas que vi en el escenario durante la presentación oficial de All Access de Google la semana pasada.
Cuando el servicio comienza a ponerse interesante es en su función de radio. Como otros planes de radio por Internet, toma algunos rasgos de una canción en particular y encuentra otras similares de alguna manera.