Primero de enero, nuevo año y una nueva década. Al empezar el año nuevo hacemos una serie de promesas a cumplir. Un ejemplo, perder peso después de las fiestas en las que comemos de más y aumentamos de peso y de cintura. Les ofrezco una fórmula que incluye ejercicio diario, especialmente despechadas. Despechadas que se hacen sentado frente a la mesa y flexionar los brazos hacia adelante, separándose de ella y comer la mitad de lo que está acostumbrado a ingerir. Que la lista de promesas y metas a lograr en el año 2,011 no sea tan larga que no se logre cumplir ni la mitad. Al hacer promesas hay que estar consciente de lo que representan y la responsabilidad hacia uno y hacia los demás. Sugiero que la lista no pase de tres y que sean las más importantes para cada quien. Espero que una de esas sea el mejoramiento de sí mismo en lo académico, en lo afectivo emocional y ponerlo en práctica pensando en otras personas y en cómo ayudarlas a mejorar en todo sentido. De repente, así, paso a paso, como las hormigas, podemos construir una paz duradera en Guatemala, que debe ser la meta prioritaria. Para cumplirla es indispensable tener una actitud positiva y la disciplina personal para tener la constancia de perseguirla todo el año. Como hablamos de una nueva década también, podemos apuntar algunas predicciones para la misma. Las predicciones no son adivinaciones, sino una visión de lo que queremos tener como sociedad, lo que es posible y lo que es probable de acuerdo al análisis del pasado y de los indicadores presentes para tener una visión del futuro. Muchos quieren aprender otro idioma a sabiendas que cada año resulta más importante tener más formas de comunicarnos con otras personas y con otras culturas en un mundo globalizado. Hay alrededor de seis mil idiomas en el mundo actual. Para comunicarnos en Internet se utilizan unos diez. Para el año 2,020 se habrán perdido unos tres mil de estos idiomas. En esta década habrá en Guatemala un movimiento que dará mucha más injerencia a las decisiones de las comunidades locales y salir de las centralizadas, «pensar globalmente y actuar localmente». Un ejemplo es que los productores de vegetales y frutas en el área rural, ofrecerán a las personas de las ciudades, la seguridad de surtirles sus productos si se inscriben con ellos y pagan una cuota mensual o anual. Eliminarán al intermediario y así obtendrán más dinero y más ganancias para el desarrollo de sus comunidades.
El Internet refinará la forma de búsqueda de los conceptos mediante los que una persona consigue información. Los que desarrollan esos «buscadores» enseñarán a sus programas a aprender el significado de las palabras de acuerdo a cómo las utilizan en una conversación, no habrá confusión en el significado. En cinco años verán el adelanto y la generalización de esto y que las comunicaciones vía Internet activadas por voz, tal y como la usan ya los cuadripléjicos, estarán generalizadas y será común encontrarlas hasta en tiendas. No habrá necesidad de usar exámenes de habilidades, de destrezas, de admisión, para ver si un alumno está capacitado o no. Los -fMRI´s-«functional Magnetic Resonance Imaging»-el PET scan-«Positron Emission Tomography»-el SQUID-«Superconducting Quantrum Interference Device», que asisten en la búsqueda de entender las funciones cerebrales, o su pariente más nuevo en un futuro más avanzado, será generalizado para conocer al niño y a la niña y sus fuentes de percepción dominantes antes que inicie su escolaridad y pueda posteriormente desarrollar sus potencialidades a nivel superior de educación. Se conocerán sus áreas de interés más fuertes, se sabrá dónde necesita mayor atención porque se sabrá cómo está organizado su cerebro y hasta probablemente se tendrá una indicación de hacia qué campo o área de concentración quisiera dedicarse en el futuro. Habrá más acceso a la tecnología para obtener más fuentes de información. No habrá laboratorios de ciencias con equipo físico en las escuelas, sino laboratorios virtuales en los que cada alumno en el aula o en su casa podrá elegir en qué actividad científica quiere participar de acuerdo a su interés, edad o capacidad, sin límites. Los alumnos podrán acceder al conocimiento de las mejores mentes en el mundo con sólo presionar uno de los botones de su menú virtual. En cinco años todas las escuelas en Guatemala estarán conectadas a una red social virtual donde los maestros pueden obtener información de los maestros de maestros para consultas y cómo mejorar su acción en el aula o donde se encuentren ellos y sus alumnos para beneficio de ambos. Cada comunidad tendrá, por igual, acceso a una educación de excelencia para su niñez y juventud. La información no discrimina, quien la utiliza la hace discriminatoria. En el 2,014 se pondrá en práctica una transformación completa del sistema educativo mediante su reestructuración. Esto sí depende de la voluntad política. ¡Deseable, factible y posible, sí es!