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Las aseveraciones de Gates constituyen una evaluación sin ambages del riesgo que representa la dictadura errática de Pyongyang, la cual considera a Estados Unidos como su mayor enemigo.

Corea del Norte tendrá dentro de cinco años una capacidad limitada para lanzar un arma con misiles balí­sticos intercontinentales hasta las costas de Estados Unidos, auguró Gates.

Pyongyang ha anunciado que efectuará pruebas con misiles balí­sticos intercontinentales y sus ensayos nucleares subterráneos muestran que ha fabricado al menos armas nucleares rudimentarias.

«El continuo desarrollo de armas nucleares y de misiles balí­sticos intercontinentales de parte de los norcoreanos ha convertido a Corea del Norte en una amenaza directa para Estados Unidos, y estamos obligados a tener eso en cuenta», afirmó Gates.

Asimismo, ha aumentado el peligro de una guerra en la Pení­nsula Coreana debido a que los surcoreanos están hartos de las provocaciones y hostigamientos de Corea del Norte, aseveró Gates.

«Consideramos ésta una situación de verdadera preocupación y creemos que es algo urgente avanzar en la ví­a de las negociaciones y el compromiso», agregó.

Corea del Norte fue responsabilizada de hundir en el primer semestre del año pasado un barco de la armada surcoreana y atacó en noviembre con fuego de artillerí­a una isla en la demarcación marí­tima disputada. En el ataque al barco murieron 46 marinos y en el de la isla cuatro surcoreanos.

Casi se le ha agotado a Corea del Sur su «tolerancia para no responder» a esas acciones, dijo Gates a la prensa en China, el único aliado de Pyongyang.

«Claro, si hay otra provocación, el gobierno surcoreano se verá apremiado a responder», expresó el funcionario estadounidense.

Gates dijo que agradecí­a al presidente chino Hu Jintao y otras personalidades con las que se entrevistó en Beijing el control ejercido sobre Corea del Norte y solicitó a Beijing que persista en disuadir a su aliado comunista a que ceje en sus actos.