Para comenzar y al mismo tiempo aclarar dudas anticipadas debo decir que en lo personal, y hasta el momento. creo que fundamentalmente el presidente Otto Pérez Molina y su vicepresidenta Roxana Baldetti en el poco tiempo que llevan de administrar al país lo han hecho bien, aunque es lógico que numerosos problemas graves como el de la violencia no desaparecerá de la noche a la mañana, ni el hambre, ni la pobreza, ni la falta de salud y educación…
(con el aporte literario de Ricardo Arjona)
Pero se avanza y no se mediatiza el poder solamente para ejercerlo con prepotencia y aumentar la hacienda propia.
Quizás donde más avances se perciben es en el combate a la corrupción y a la impunidad, aunque al Ejecutivo no lo acompañen los otros dos poderes del Estado, ni tampoco instituciones autónomas que debían de formar frentes sólidos para una lucha común contra el flagelo de los ladrones que durante mucho tiempo, cada cuatro años, el 14 a las 14 como decía aquel que junto con Arzú vendió la electricidad y la telefonía nacional, empezaban a trabajar para ellos mismos, sus cuates y correligionarios, aunque ello no quiera decir que en este gobierno no existan personas y grupos que están al acecho y con la mano lista para vaciar los fondos públicos.
De todas formas, al menos el Presidente al contrario de los que en los últimos años han sido ejemplo de lo que es la rapiña institucionalizada o personalizada, es un hombre que trabaja con fuerza y entusiasmo para lograr objetivos definidos y afronta problemas que otros rehuían. Tras esta introducción de mi posición hasta este día 30 de marzo, tengo también que referirme al pelo en la sopa, al pero que lamentablemente casi siempre acompaña las acciones que se llevan a cabo, lo que demuestra que nada es perfecto.
Dije en alguna oportunidad que una de las cosas que miraba con suspicacia en el nuevo Presidente era que encontraba que su equipo de trabajo, en una parte al menos, no era el más adecuado y lo segundo, su estrecha vinculación con los millonarios de este país que sin reserva alguna, para mejorar sus propia situación, se han aliado, a lo largo de la historia, con golpistas, ladrones de todo tipo y a toda escala, genocidas y multihomicidas, y cualquiera que pueda servirles para aumentar sus ingresos.
Esta parte de la supercúpula empresarial que tanto daño ha causado al país es la que se encarga de mantener esa disparidad social y económica que abre cada vez más profundas grietas entre ricos y pobres con el peligro que puede conllevar en determinado momento una confrontación como la triste historia de la guerra que vivimos y en donde esta misma supercúpula, si hubieran advertido o intuido que la guerrilla llevaba las de ganar, hoy mismo serían sus mejores aliados, como me decía un viejo amigo millonario a quien poco antes de morir sus parientes, incluyendo sus hijos, lo dejaron en la calle y falleció en el Hospital Roosevelt y algunos de sus cuates hicimos la cooperacha para enterrarlo: «mirá -me advertía en sus buenos tiempos-, lo mejor del mundo es el dinero y si hay algo mejor que eso, es, tener más dinero, con eso comprás todo»
La libertad, igualdad y fraternidad surgida como símbolo de la Revolución Francesa y plasmada en casi todas las constituciones de los países del mundo, en diferentes formas y principios es solamente un mito. Y en Guatemala lo es aún más, porque aquí la cosa no es pareja, ni lo será nunca. Pongo un ejemplo de cómo el Estado y en este caso el gobierno es ejemplo vivo de esa desigualdad. Una gran cantidad de pequeños contribuyentes del IVA, están siendo perseguidos y «TRABADOS» por la SAT. Basta un solo caso de un amigo dueño de una pequeña tienda, al que le llegó un aviso-citación porque debe 193 quetzales del IVA del año 2010. Vive en la zona 1 y le piden que se presente en Montserrat, zona 7, creo que en un centro que se llama Montereal donde hay una oficina de la SAT que aduce como prueba del cuantioso «hueveo» que los agentes retenedores presentaron ese informe. Joden a mi amigo, jubilado como yo, para ir hasta ese sitio, en lugar de enviarlo a una agencia más cercana y resulta ridículo y absurdo que sea un «agente retenedor» quien diga que esta persona no pagó el IVA. es casi como si se tratara de un asesino confeso pues el agente retenedor como su nombre lo indica «retiene» el IVA para supuestamente entregarlo después, aunque en la mayoría de negocios, sobre todos los grandes también se lo «huevean» al no dar factura.
¿Por qué, me pregunto, no se trata a todos por parejo? Por qué no se fiscaliza a los grandotes y se deja de fregar a los chiquitos? ¿Por qué las modificaciones impositivas van en el camino de «ampliar la base tributaria», como dicen los cacifes lo que implica joder a los tenderos y comerciantes informales? Por qué no les aumentan en un 25% las regalías de las minas que se están hartando al país? ¿Por qué no se controla a las multimillonarias TRES EMPRESAS DE TELEFONIA que se roban más IVA que toda la economía informal de Guatemala? ¿Por qué no se gravan más los artículos de lujo, como vehículos, en lugar de fregar a los que traen vehículos viejos de Estados Unidos? ¿Por qué no se grava con un impuesto especial a las utilidades de los bancos que el año pasado «ganaron» gracias a sus clientes que ahorran o piden crédito, la respetable suma de Q2,400 millones? ¿Por qué General?
Sé por supuesto que un buen cuchubal de los Q149 millones que costó su campaña fue reunido por azucareros, banqueros, industriales y grandes comerciantes, pero yo creo en usted presidente Pérez Molina y no creo que empiece a pagar facturas políticas a costa de los más pobres y la gente trabajadora que está más fregada. Para ser Presidente de TODOS LOS GUATEMALTECOS, empiece por tratarlos a todos por igual y aplique analógicamente algo de la Biblia, para que a los ricos se midan con una cuarta más, porque más fácil es que pase un camello por el ojo de una aguja que ellos entren al Reino de los cielos. No lo dijo Arjona, lo dijo el mero, mero. Jesús, le toque a quien le toque…