Una mayoría de los electores de California (oeste) rechazaron ayer en las urnas la legalización de la marihuana, que pudo convertir a este estado en el primer lugar en el mundo en equiparar su cultivo, comercio y consumo de alcohol y tabaco.
La llamada Propuesta 19, realizada en forma conjunta con las elecciones de medio mandato y una serie de referéndums en Estados Unidos, fue rechazada por 56,8% votos contra 43,2% a favor, según indicaron los últimos resultados electorales.
El cultivo y la venta del cannabis con fines medicinales es legal en California desde 1996 y, aunque la legalización global fue rechazada el martes, los impulsores de la iniciativa dijeron que se dio un paso adelante con la campaña que despertó un debate nacional y en el extranjero.
La ley contemplaba permitir a los mayores de 21 años poseer hasta una onza (28,35 gramos) de marihuana y cultivar una superficie máxima de 2,34 metros cuadrados de cannabis.
Los defensores de la propuesta, ampliamente votada por los jóvenes, reaccionaron optimistas ante el revés: «El hecho de que millones de californianos hayan votado por la legalización de la marihuana es una tremenda victoria», dijo Richard Lee, impulsor de esta consulta.
«Rompimos el hielo, la Proposición 19 cambió los términos del debate y eso era un objetivo estratégico importante», dijo, estimando que en 2012 el apoyo será mayor.
El rechazo de la Propuesta 19 fue «porque algunas de las personas que apoyan la legalización de la marihuana siguen nerviosas acerca de esta iniciativa específica, nerviosos sobre cómo va a responder el gobierno federal», dijo Ethan Nadelmann, director de la Drug Policy Alliance, una asociación que milita por la despenalización de las drogas.
Los presidentes de México, Colombia y otros de países de América Central fueron quienes criticaron más abiertamente la propuesta californiana, advirtiendo sobre la falta de «coherencia» que supondría para Estados Unidos la legalización de la marihuana en su política antidrogas en la región.
«Legalizar la marihuana, particularmente cuando se hace a nivel local o de manera unilateral o aislada en el contexto internacional, no disminuirá la violencia en México», afirmó el martes el portavoz del gobierno mexicano para asuntos de seguridad nacional, Alejandro Poiré, en un mensaje a los medios.
Esta medida, por el contrario, «genera mayores estímulos económicos para los criminales» porque ampliaría el mercado del primer país consumidor de drogas del mundo.
Los defensores de la regularización del cannabis argumentaron durante la campaña que sería una forma eficaz de combatir el tráfico de drogas y de crear una novedosa forma de negocio y, sobre todo, una generosa fuente de recaudación de impuestos en este estado, conocido por su multimillonario déficit fiscal.
Al margen de las aprensiones en el extranjero, en California la campaña a favor de la legalización del cannabis recaudó más de 4,2 millones de dólares de donantes tan prominentes como el millonario estadounidense de origen húngaro George Soros y los cofundadores de la red social Facebook, Dustin Moskovitz y Sean Parker.
Figuras del espectáculo como el actor Danny Glover, la cantante Melissa Etheridge y el humorista Hal Sparks hicieron campaña por la legalización del cannabis.
Entre los adversarios locales destacaron todos los candidatos a la gobernación, los dos aspirantes al Senado, el Fiscal General Eric Holder y Arnold Schwarzenegger, que reconoció al final de la noche por Twitter que votó No a la iniciativa.
Como sucedió con el matrimonio homosexual en 2008, los votantes de California -donde se inscribieron casi 17 millones de electores- abrieron con el referéndum un debate nacional sobre la situación de la marihuana, pero la tendencia general en las elecciones de medio mandato en Estados Unidos fue conservadora, favoreciendo al ala más ortodoxa del Partido Republicano.
Dos republicanos de origen hispano, Susana Martínez y Brian Sandoval, ganaron ayer las gobernaciones de Nuevo México y Nevada en el oeste de Estados Unidos, reflejo de la importancia del voto latino pero en favor de un ala conservadora tradicionalmente dura hacia esta minoría.
Los triunfos de Martínez y Sandoval se sumaron al de otro correligionario, Marco Rubio, un cubano estadounidense de 39 años que ganó una banca al Senado por Florida y se convirtió en el hispano estrella del Partido Republicano.
«Los candidatos latinos contribuyeron a la significante victoria a nivel nacional del Partido Republicano, a nivel estatal y federal, y muchos hicieron historia en el proceso», celebró en un comunicado La Asociación Nacional de Funcionarios Electos Latinos (NALEO por sus siglas en inglés).
A medida que avanzaba el recuento de los votos, medios en español intentaban descifrar la postura frente a la inmigración indocumentada de estos representantes de la primera minoría en Estados Unidos: los cerca de 44 millones de hispanos.
La tendencia del nuevo liderazgo republicano se afinca en un discurso de mano dura frente a Cuba, contra la inmigración ilegal y profesan su fe católica, pero defienden una reforma migratoria.
«El misterioso Brian Sandoval», comentaba un foro de la principal cadena hispana Univisión sobre el próximo gobernador de Nevada, quien no habla español y ha evitado expresarse abiertamente sobre temas migratorios.
Martínez, una fiscal de 51 años, se convirtió en la primera mujer gobernadora de origen hispano en Estados Unidos al ganar en Nuevo México, donde sustituirá al demócrata Bill Richardson, de origen mexicano.
Conocida como una funcionaria inflexible durante los 13 años que ha ocupado el cargo de Fiscal del Tercer Distrito Judicial del Condado de Doña Ana en Nuevo México, Martínez se impuso a la demócrata Diane Denish, vicegobernadora del gobernador saliente Richardson, según las proyecciones electorales.
La fiscal, nacida en julio de 1959 en El Paso, Texas (frontera con Ciudad Juárez, México), levantó su popularidad política resaltando la falta de confianza en la actual administración de Richardson.
«Susana se guía por los valores y principios conservadores que le fueron inculcados a una temprana edad. Ella cree en menos gobierno, impuestos más bajos y responsabilidad personal. Ella está en contra del aborto y apoya enérgicamente la Segunda Enmienda de la Constitución», dice un mensaje de Martinez en su página web.
Según su biografía, sus padres emprendieron en la ciudad fronteriza de Texas un próspero negocio de guardias de seguridad, en el que ella misma llegó a trabajar para terminar sus estudios en derecho en la Universidad de Oklahoma.
Actualmente Martínez está casada con Chuck Franco, subcomisario del Condado de Doña Ana en Nuevo México y tiene un hijastro enrolado en la marina de Estados Unidos.
En Nevada, Sandoval, un juez federal de 47 años, derrotó a Rory Reid, hijo del líder de la mayoría demócrata en el Senado, Harry Reid.
«Â¡Lo hicimos! Gracias por su apoyo», escribió Sandoval en su página web.
Aunque el candidato ganó con el mote de «primer hispano por la gobernación de Nevada», donde el voto latino representa el 12% del total del estado, el político nació en California y fue blanco de una polémica durante el verano porque supuestamente dijo en una entrevista a una estación de Univisión: «Mis hijos no se ven como latinos».
En los últimos días de campaña Sandoval desmintió esta declaración.
Casado y padre de tres niños, Sandoval fue designado en 2005 por el ex presidente George W. Bush Juez Federal del distrito de Nevada, cargo que también asumió como el primer magistrado federal hispano.
En el oeste del país, California fue prácticamente el único estado que votó a los candidatos demócratas para sus principales cargos, Gobernador y senadora.
En Arizona la gobernadora de Arizona, Jan Brewer, que promulgó una polémica ley anti inmigrante en julio, ganó por amplia mayoría.