Ante el recrudecimiento de las acciones violentas que dejan como saldo muerte y más muerte en el paí­s, es necesario que las autoridades policiales despierten del letargo en que se han mantenido, es decir, adoptar conductas de reacción ante los actos criminales.

     Hasta la saciedad, se abordó el tema de la profesionalización en el aspecto de PREVENCION  POLICIAL, sin embargo, las autoridades ministeriales y policiales no le han dado la importancia que este rubro representa para la sociedad guatemalteca. Es posible que, otra vez, esté arando en el mar al escribir estas lí­neas, pero es de suma importancia trabajar en la formación de cuadros de OFICIALES DE POLICíA NACIONAL CIVIL para lo cual, la respuesta ideal serí­a la creación de la Escuela de Oficiales de Policí­a.

       Según declaraciones del Ministro de Gobernación publicadas el dí­a de hoy en el Diario de Centro América, la profesionalización de la Policí­a Nacional Civil avanza, a pesar de limitaciones presupuestarias que frenaron o hicieron más lentas algunas etapas del proceso. Informó que: “las autoridades de la PNC decidieron impulsar los cursos de ascensos y especialidades”, este tipo de oportunidades “no se les daba a los agentes desde hace ocho años”; LO CUAL NO ES CIERTO, pues en administraciones policiales anteriores se han desarrollado cursos de “ascenso” los cuales se realizaron a pesar de sus vicios en la selección de las personas que los tomaron y de una u otra manera han aportado aunque sea en forma mí­nima algo positivo para la institución.

PERO…. De acuerdo con registros del Instituto Nacional de Ciencias Forenses, en lo que va de 2011 se han descubierto los cadáveres de 68 mujeres descuartizadas en todo el paí­s (Prensa Libre 23 Sept. 2011); por lo anterior, cabe preguntar: ¿existe aún el viceministerio de apoyo comunitario? o ¿aún sigue de adorno? Se supone que esa es la dependencia estratégica de donde salgan las polí­ticas de PREVENCION SOCIAL a implementar en la comunidad para reducir los actos criminales.

El blá blá blá de los funcionarios encargados de la seguridad pública ya causa náusea pues pretende  justificar su ineptitud en dicha materia; pero lo aprovecha para adular a las autoridades jerárquicas superiores indicando: “Con el Gobierno del presidente ílvaro Colom la fuerza pública tiene ahora jerarquí­as “profesionales” en comisarí­as, estaciones y subestaciones, que eran regidas por agentes, teniendo el 50% de los mandos cubiertos”.

ACLARACIí“N: El recibir un curso de ascenso no hace profesional a una persona; muy distinto es FORMARLO; la diferencia entre estos aspectos educativos no la entienden los oficiales policiales que dirigieron la Academia de la Policí­a Nacional Civil, pues no saben ni conocen la forma de aplicar el proceso educativo (fondo y forma) a la actividad policial. ¡Lógico! No es su chance.