La escalada de violencia que golpea a la región centroamericana, derivada de la penetración del narcotráfico, alcanzó niveles “alarmantes”, que se ven agravados por los casos de corrupción en las estructuras estatales, la pobreza que afecta a gran parte de la población de la región y la desigualdad, según el informe anual de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE) de Naciones Unidas.
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Según el informe citado por una agencia internacional, la violencia de las organizaciones de narcotraficantes, ligadas también a bandas transnacionales y a las maras que operan en la región, “no tiene precedentes”.
TRÁFICO REGIONAL
Según la JIFE, nada menos que el 90 por ciento de la producción de drogas que se lleva a cabo en varios países de América del Sur, pasa por Centroamérica, que figura geográficamente como el “puente natural” hacia México y Estados Unidos; además, el “valor añadido” de la cocaína alcanzaría el 5 por ciento del Producto Interno Bruto de toda América Central, es decir, unos US $7 mil millones.
En el estudio, según la agencia, se estableció que existen pruebas “que la corrupción aumenta con el tráfico de drogas”. Lo cual es consistente con los argumentos que el presidente de Guatemala, Otto Pérez Molina, vertió en días recientes.
Entre otras cosas, el estudio señaló que Guatemala, “principalmente”, sufre las consecuencias de una ola de violencia, “en gran parte, por la penetración de cárteles de narcotraficantes como el mexicano Los Zetas”.
LA RECOMENDACIÓN
Sin embargo, a pesar de reconocer que la ola de violencia que afecta a la región centroamericana se deriva, en parte, por el narcotráfico, que es influyente en el aumento de la corrupción e incide “negativamente” en el sistema de justicia de varios países del Istmo, la JIFE “recomendó” a los gobiernos de los países de Centroamérica aplicar estrategias ya conocidas.
La JIFE pidió que en la región se administren medidas contra el narcotráfico, control de armas de fuego y, además, reformas al sistema de justicia. Lo que deberá encontrar complemento con la asignación de más recursos a programas de salud pública y campañas de prevención en el uso de drogas.
Eso, porque según se informó, el 50 por ciento de los tratamientos por drogas es por el abuso en el uso de cocaína.
LA VICE DE GIRA
Hoy inició el periplo de la vicepresidenta de Guatemala, Roxana Baldetti, a los países centroamericanos con el fin de dar a conocer, de forma personal, la propuesta del presidente Otto Pérez Molina, sobre poner en la mesa el debate de despenalizar la producción, tráfico y consumo de drogas.
Según informó el Presidente guatemalteco, en días previos, la visita de la Vicemandataria consiste en hacer una corta presentación que integra los costos de la lucha contra el narcotráfico, las medidas que tomaron otros países que ya iniciaron el proceso de legalizar ciertas drogas, entre otros.
ESTADOS UNIDOS E ISTMO SE OPONEN
Ayer, la vista de la secretaria de Seguridad Interior de Estados Unidos, Janet Napolitano, además de tocar otros temas, como TPS para migrantes guatemaltecos en ese país, sirvió para ratificar la negativa del país norteamericano acerca de considerar la legalización de las drogas.
Esta negativa encontró eco en la mayoría de países de Centroamérica y también en México, a pesar que en un primer momento, algunos de sus Presidentes apoyaron la iniciativa de Pérez Molina.
A pesar de ello, el gobierno de Panamá dijo que escuchará la propuesta que lleva Baldetti, en un contexto de respeto; gesto que el Presidente de Guatemala espera hacia su propuesta, para llevarla más allá del nivel regional.
Reuniones
El presidente Otto Pérez Molina se reunió hoy con miembros del Consejo Asesor de Seguridad para afinar detalles sobre estrategias de las fuerzas de tarea, y posteriormente con los expresidentes de El Salvador Francisco Flores y Alfredo Cristiani.
En el tema de seguridad, el Presidente dijo que en ocho meses se construirá una nueva prisión en el municipio de Fraijanes, para evitar el hacinamiento de los reos que se tiene en la actualidad. Además, destacó que al finalizar su período, habrá seis prisiones regionales.
Por aparte, los expresidentes salvadoreños, comentó el Presidente, respaldaron su opinión de buscar otra forma de enfrentar el narcotráfico, en contraposición a la armada. A su llegada, Francisco Flores, ex presidente de El Salvador, comentó que su visita es para agradecer la invitación de Pérez Molina a su toma de posesión, a la que no asistió por otros compromisos.