El flamante ganador de Roland Garros, el español Rafael Nadal, intentará el domingo conseguir su segundo triunfo en el torneo sobre hierba de Wimbledon, ante el checo Tomas Berdych y, de esta manera, lograr el que sería su octavo título de Grand Slam de su carrera.
Nadal, que sufre un dolor en la rodilla, se mostró intratable en tierra batida en París y está a punto de convertir Londres en su segundo territorio favorito.
En esta edición, Roger Federer luchaba por hacerse un hueco entre las leyendas como Pete Sampras o John McEnroe antes de caer eliminado por Berdych, mientras el mallorquín busca romper la supremacía del suizo en el tenis mundial.
Ahora Nadal está entrando a formar parte de los mejores de la historia, al mismo tiempo que se mide a sus contemporáneos.
Si lograra alzarse con el triunfo en tierras londinenses, se colocaría en la séptima posición en el palmarés de tenistas que ganaron más títulos de Grand Slam, al igualar a jugadores como Andrea Agassi, Ivan Lendl y Jimmy Connors (siete victorias).
Además, Federer solamente había logrado seis títulos cuando tenía 24 años, la edad actual de Nadal.
Asimismo, si el español se lleva el trofeo se distanciaría de su seguidores como el serbio Novak Djokovic, que arrebató el segundo puesto en el ránking mundial a Federer, después de que éste último cayera eliminado ante Berdych en cuartos de final de Wimbledon.
No obstante, Nadal se enfrentará a un Berdych que intentará ser el primer checo en imponerse en un Grand Slam, después de que lo hiciera Petr Korda en Melbourne en 1998.
Tras ganar a Federer y luego a Djokovic en semifinales, tendrá la posibilidad de lograr un título después de haber superado a los tres mejores del planeta, una proeza que ningún jugador de esta generación ha logrado hacer.
Al mismo tiempo, Berdych jugará en una pista a la que su compatriota Ivan Lendl siempre fracasó. Un triunfo que se anuncia complicado puesto que el checo, nueve meses mayor que Nadal, tiene menos experiencia que su rival en la final.
El manacorí venció a Berdych en los últimos seis encuentros y, precisamente, en un cuarto de final de Wimbledon en 2007. Solamente se encontraron hasta ahora en una final hace cinco año en Bastad (Suecia).
Ambos tenistas se conocen desde hace tiempo. Al principio su relación fue un poco agitada, después que de Nadal dijera que se tratara de una mala persona tras el encuentro en Madrid en 2006.
Después, se reconciliaron y llegaron hasta jugar un doble juntos.