Nairo Quintana se convirtió en el primer colombiano que gana el Giro d’Italia y se confirmó como nueva estrella del ciclismo.
Tras 21 etapas de carrera y 3.445 kilómetros, el corredor del Movistar se impuso con 2:58 minutos de ventaja sobre su compatriota Rigoberto Urán. El podio de la segunda prueba más importante del mundo lo completó el italiano Fabio Aru (+4:04).
La última etapa, que terminó hoy en Trieste tras 172 kilómetros, se la adjudicó el esloveno Luka Mezgec, por delante del corredor local Giacomo Nizzoli.
Quintana, de 24 años, es el representante más destacado de la nueva generación de ciclistas de Colombia y con su victoria confirmó su potencial como «hombre Tour», aunque este año el equipo decidió que no correrá en Francia.
Será en 2015 cuando intente el asalto a la carrera más importante del mundo. Incluso contempla la posibilidad de hacer doblete: Giro y Tour.
Después de su segundo puesto en la carrera francesa en 2013, el colombiano no ha dejado de sorprender al mundo del ciclismo. «No estoy todavía para rendir al 100 por ciento», dijo el sábado tras la subida al Monte Zoncolan, cuando en la penúltima etapa del Giro defendió con soberanía la «maglia rosa» de líder.
El colombiano aludió a los problemas respiratorios que le ocasionó un enfriamiento en las últimas jornadas del Giro. En efecto, el corredor se pasó las conferencias de prensa más tiempo tosiendo que hablando.
Pero esas dificultades no impidieron al hijo de un vendedor de fruta ganar el martes la más dura etapa de montaña de la carrera, así como también la cronoescalada en el Monte Grappa, el viernes, dando a menudo la sensación de jugar con sus adversarios. «Yo intento correr bien en la etapas pero nunca echar mano de las últimas reservas», dijo.
El grácil sudamericano, que en la contrarreloj recibió la visita de sus orgullosos padres, parece no saber él mismo de lo que es capaz cuando sus condiciones físicas estén al máximo.
Las sospechas de doping las espanta rotundo: «Yo soy sólo un hombre. Tengo mis límites y conozco el agotamiento». Cuáles son esos límites es una excitante pregunta para el futuro.
Eusebio Unzué, su jefe en el equipo Movistar, lo cree capaz de ganar el Tour. «Vamos a trabajar en ese sentido. Tiene madera para ello», dijo a dpa. Aparte de sus premisas físicas, Quintana aporta también las mentales. «Pese a su juventud es ya un líder», subrayó Unzué.
Quintana es además protagonista de un cuento de hadas, pues es un muchacho que creció en la pobreza y a cuyos pies se rinde ahora el mundo del ciclismo.
La primera bicicleta del colombiano fue un pesada de calle de 30 dólares con la cual cubría diariamente 32 kilómetros hasta la escuela. La casa de sus padres se hallaba en la cumbre de una cuesta del ocho por ciento. Ese monte lo ascenderá seguramente de nuevo en julio pero con mejor material.
Mientras Alberto Contador y Christopher Froome peleen en el Tour, él descansará en casa. En 2015 volverá a Francia como potencial candidato a la victoria final.
Mientras tanto, en su país de origen se desató ya la euforia. «Hoy es un día histórico. Histórico para Boyacá, para Cómbita y para Colombia. ¡Viva Colombia y viva la paz!», dijo hoy el presidente de la nación, Juan Manuel Santos, en el municipio y región en la que creció Quintana.
Celebra triunfo con un «¡viva Colombia!»
El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, celebró hoy con un grito de «¡viva Colombia!» el triunfo del ciclista Nairo Quintana en el Giro d’Italia y afirmó que lo logrado por el pedalista y su compatriota Rigoberto Urán, quien quedó segundo en la carrera, «es histórico» para el país sudamericano.
Quintana, de 24 años, se impuso en una de las tres carreras ciclísticas más importantes del mundo con 2:58 minutos de ventaja sobre su compatriota Urán tras 21 etapas de carrera y 3.445 kilómetros.
Desde el municipio de Cómbita, en el departamento de Boyacá (centro), en donde creció Quintana, Santos se unió a la celebración que miles de colombianos realizaron en homenaje a quien es ahora denominado como «Nairoman», por sus destrezas con la bicicleta.
«Hoy es un día histórico. Histórico para Boyacá, para Cómbita y para Colombia. ¡Viva Colombia y viva la paz!», dijo el mandatario al asegurar que con la victoria de ambos pedalistas quedó demostrado «que Colombia es tierra de orgullo y paz».
La visita del jefe de Estado finalizará en Cómbita con la inspección de las obras de la Villa Olímpica que prometió construir en el poblado, ubicado a 165 kilómetros al norte de Bogotá, para promover el ciclismo en los niños de la región luego del segundo lugar que logró Quintana en el Tour de France de 2013.
Finalmente, Santos viajará a Tunja, capital de Boyacá, para participar en las celebraciones de la fiesta en honor a la virgen del milagro, en la que se espera la asistencia de al menos 30.000 personas.
Asimismo, en todos los rincones de Colombia siguen celebrando el más grande triunfo alcanzado por un pedalista nacional, después de las hazañas conseguidas en décadas anteriores por Alfonso Flórez, Luis Herrera, Fabio Parra y Martín «Cochise» Rodríguez.