
Los devastadores incendios que afectan a las islas de Tenerife y Gran Canaria en el archipiélago español de las Canarias han quemado más de 24 mil hectáreas y han obligado a la evacuación de cerca de 11 mil personas, dijo hoy el presidente de esa región, Paulino Rivero.
«Se han quemado más de 24 mil hectáreas», afirmó Rivero en una entrevista con la radio Cadena Ser, en referencia a los dos principales incendios que afectan al archipiélago, cuya situación calificó de «dramática».
«La geografía de las islas hace muy complicado combatir el fuego excepto desde el aire, y cuando hay mucho viento y la temperatura es muy alta impide que los helicópteros normales pueden operar», añadió Rivero.
En la isla de Gran Canaria, «la superficie quemada está en torno a 10 mil hectáreas y hemos tenido que evacuar a alrededor de 5.200 personas», dijo el presidente regional.
La mayoría de estos evacuados proceden de los municipios de San Bartolomé de Tijarana, Tejeda, Mogán o Tunde (centro-sur de la isla), localidad que fue desalojada anoche.
En la localidad de San Bartolomé de Tijarana, un parque zoológico ha quedado arrasado en gran parte, según fuentes de la delegación del gobierno.
Además, dos soldados pertenecientes a la Unidad Militar de Emergencia (UME), que actúa contra los incendios, resultaron heridos leves al volcar el martes el camión autobomba en los que viajaban cerca de Fataga (centro), donde se encuentran los dos principales focos del fuego, informó el ministerio de Defensa.
«La situación en la isla es complicada», afirmaron a la AFP fuentes del Cabildo (autoridad isleña) de Gran Canaria, que ampliaron hasta «20.000 hectáreas el perímetro» del incendio, que se inició el pasado viernes de forma intencionada.
El pirómano, un guardia forestal que confesó haber iniciado el fuego porque se le acababa el contrato en septiembre, ha ingresado en prisión acusado de un delito «de incendio» y otro «contra el medio ambiente».
Cuatro focos siguen muy activos, aunque los medios contraincendios se están concentrado en los dos que más preocupan en Fataga, donde los vecinos, evacuados en la noche del lunes al martes presionaron el martes sobre el cordón policial para volver a sus casas, constató una fotógrafa de la AFP.
En la lucha contra el fuego están actuando «en torno a 10 helicópteros, (y) está otro en camino», añadió Paulino Rivero.
Los otros dos focos se situarían en la zona de la presa de Siberio, donde se concentrarán los esfuerzos una vez que se consiga controlar los dos principales focos.
En las labores de extinción trabajan más de 500 efectivos, entre bomberos, militares y miembros de protección civil, aunque su labor se está viendo dificultada por el fuerte viento y las altas temperaturas.
En la otra isla, en Tenerife, el fuego que se inició el lunes ha afectado a «14.000 hectáreas y las personas evacuadas son 5.700», añadió Paulino Rivero.
«El perímetro del fuego es de 13.695 hectáreas, de las que se habrían quemado un 20%», precisó a la AFP una portavoz del Cabildo en Tenerife, quien cifró en 4.200 las personas evacuadas por el incendio que se inició el lunes.
El fuego está afectando afectando a varios municipios del norte de la isla, entre ellos Garachico, Santiago del Teide o Los Realejos, donde tuvo su origen el fuego.
Dos helicópteros y un hidroavión participan en las labores de extinción, en las que también trabajan alrededor de 300 personas en tierra.
La misma fuente señaló que se espera a lo largo del día la llegada de 145 militares para ayudar en las tareas de extinción así como dos hidroaviones.
La portavoz del Cabildo precisó que no hay previsiones sobre cuándo podrá ser controlado este fuego.