Muere Yma Súmac


Foto tomada en abril de 1952 de la cantante soprano peruana Yma Súmac, en una visita en el Albert Hall de Londres.

La muerte de la diva peruana Yma Súmac en Los íngeles provocó ayer una reacción masiva de dolor en la prensa peruana, donde se recordó que poseí­a un prodigioso registro de voz que podí­a mezclar los tonos más agudos con los más graves en una misma melodí­a.


Foto tomada en mayo de 2006, de Yma Súmac, la peruana que murió a los 86 años de edad.

Desde tempranas horas las televisoras y radios dedicaron amplios espacios a la soprano, cuya muerte a los 86 años de edad, ocurrida el 1 de noviembre en un hogar de ancianos, recién se difundió ayer ví­a su sitio oficial en Internet.

Enrique Bernales, presidente de la Asociación Lí­rica del Perú, recordó que «Yma Súmac tení­a una voz totalmente fuera de lo común. Las notas más graves y más agudas las hací­a en una sola canción».

«De todos los registros que se tienen conocimiento desde el siglo XX, Yma Súmac tení­a la única voz que era capaz de ese prodigio, pero además, lo hací­a sin desafinar, con notas colocadas exactamente en su registro y en su tono musical», declaró a la radio local RPP.

Su excepcional registro vocal poseí­a una enorme variedad de tonos que van desde las notas de un tenor hasta los sobreagudos más agudos de la soprano más aguda, resaltó el crí­tico musical José Quezada.

«Es la única peruana que tiene inscrito su nombre en el Paseo de la Fama en Hollywood», señaló con orgullo un canal de televisión local.

En tanto, la Cámara de Comercio de Hollywood, que administra este boulevard turí­stico, anunció que colocará flores sobre la estrella de la «Peruvian Songbird» Yma Sumac, en el Paseo de la Fama, e invita a sus fanáticos a depositar flores en ese lugar.

Yma Súmac, cuyo verdadero nombre era Zoila Augusta Emperatriz Chavarri del Castillo, viví­a desde hace 60 años en Los Angeles, donde se labró un nombre en Hollywood en la década de 1950 y 1960.

Su nombre artí­stico significa en español «qué hermosa» y se popularizó del quechua (el idioma de los incas) para reforzar la leyenda de que se trataba de una descendiente del último inca Atahualpa, muerto en el siglo XVI.

Durante el esplendor de su carrera artí­stica, en las décadas de 1950 a 1960, actuó en Estados Unidos, Francia, la ex Unión Soviética, Japón, Italia, Gran Bretaña y paí­ses de Europa del Este que formaron parte del bloque soviético.

Presentándose como una sacerdotisa inca, la diva triunfó en musicales de Broadway y Hollywood, y también protagonizó con Charlton Heston el filme «The secret of the Inca» (1953), a la vez que grabó numerosos discos.

Vendió miles de discos interpretando música andina y latinoamericana, y en los años 90 la música pop estadounidense la redescubrió. Su disco más popular fue «Mambo».

Yma Súmac fue una pionera en la música popular al mezclar géneros diversos como la música folklórica con el jazz, el mambo e incluso el rock, un estilo personal que la hizo famosa pero que al mismo tiempo le valió crí­ticas de los puristas, señaló el diario El Comercio.

«Yma Súmac fue una adelantada a su tiempo. Por eso es considerada un í­cono en todo el mundo», afirmó el promotor lí­rico Miguel Molinari.

Reconocida como la artista peruana de mayor prestigio en la historia de la música, Yma Súmac fue condecorada con la orden del Sol por el gobierno peruano en 2006 con ocasión de su última visita a Lima.

«Es la única peruana que tiene inscrito su nombre en el Paseo de la Fama en Hollywood».

Mensaje de un canal peruano de televisión