El Observatorio en Salud Sexual y Reproductiva (OSAR) de Alta Verapaz, lamentó que el Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social (MSPAS) incumpla la ley de Planificación Familiar, al no brindar educación sexual en los establecimientos educativos, tal como lo establece el artí­culo 10 de esa normativa.

Ana Victoria Maldonado, secretaria técnica del OSAR, lamentó la posición del MSPAS y dijo que durante el ciclo 2011 darán a conocer los derechos y responsabilidades sobre sexualidad a los jóvenes, aunque no les guste a los padres de familia, directores o maestros.

La comunicación es un vehí­culo para el cambio de comportamiento y actitudes de los adolescentes y el acceso al conocimiento de los factores de riesgo contribuye a que ya no se sigan reportando embarazos en niñas y adolescentes, manifestó Maldonado.

Por otra parte la representante de OSAR dijo que la entidad considera positiva la voluntad del MSPAS para crear espacios de prevención, como las escuelas abiertas y espacios amigables, que incluyen el tema sobre salud sexual y reproductiva.

El pedagogo Virgilio ílvarez, dijo a La Hora, que la educación sexual no debe limitarse a enseñar a los alumnos las partes del aparato reproductor o el proceso de gestación humana. Se deben incluir en el tema, los puntos de protección contra enfermedades que se transmiten por la ví­a sexogenital, la prevención de embarazos no deseados y se debe orientar a los alumnos de manera imparcial. «Sucede que a veces reciben charlas sobre el tema y los maestros no se limitan a informar o aconsejar, sino a convencer a sus alumnos que lo que ellos dicen es lo correcto», asegura el profesional.

Según ílvarez, cada persona tiene creencias y valores distintos, y la educación sexual que se imparte debe ir dirigida de manera que los adolescentes no se sientan obligados a cambiarlas por lo que los docentes les indiquen. «Vivimos en una sociedad conservadora, autoritaria y machista, y la educación, especí­ficamente la sexual, no se escapa de esta tendencia que lo único que hace es reprimir conocimientos que deben saber tanto las mujeres como los varones».

Los contenidos son múltiples y van desde el conocer el cuerpo humano hasta asuntos como el noviazgo, la orientación sexual, prevención de enfermedades, salud reproductiva, entre otros. «Para empezar hay que transmitir a los alumnos de manera detallada cómo funcionan cada uno de sus órganos genitales y reproductores, algo importante, es que los maestros deben educar y no implementar», recomienda el experto.

*Con información de la Agencia CERIGUA