El economista Mario Monti conformó un gobierno hoy, encargado de aplicar las reformas que permitirían a Italia evitar el desastre financiero, y en el cual él será primer ministro y ministro de Hacienda.
La presidencia dijo que Monti prestará juramento en las próximas horas, junto con los miembros de su gabinete.
En breves declaraciones, Monti dijo que apunta a reanudar el crecimiento económico. También declaró su respeto por Silvio Berlusconi, quien renunció el sábado bajo la presión de los mercados.
Monti dijo a los periodistas en el Palacio del Quirinal que intentará poner en marcha «sacrificios» para salvar la economía nacional y permitir el crecimiento económico.
El primer ministro, de 68 años, y su gabinete prestará el juramento de cargo a las 1600 GMT, poniendo fin oficialmente a tres años y medio del último mandato de Silvio Berlusconi y sus 17 años de carrera política.
Monti dijo que describirá el jueves en el Senado su política anticrisis, antes de una votación de confianza. Una segunda votación, en la Cámara de Diputados, tendrá lugar el viernes de prosperar la primera.
Insistió que su prioridad será el «crecimiento» económico.
Monti explicó que sus consultas con los líderes de los principales partidos le llevaron a la conclusión «de que sería útil la ausencia de políticos» de su gabinete.
Según Monti, Italia puede superar la crisis si la ciudadanía — con frecuencia profundamente dividida sobre el largo mandato de Berlusconi — puede unirse. Se reunió además con dirigentes sindicales y representantes de la patronal.
«Espero que, gobernando bien, podamos hacer una contribución a la calma y cohesión de las fuerzas políticas».
La formación de un gabinete tecnócrata podría causar rencillas en el Partido de la Gente Libre de Berlusconi, que acabó respaldando a Monti. Empero, el principal socio de coalición de Berlusconi, la Liga del Norte, anunció que permanecerá en la oposición durante el gobierno de Monti.