En la legislatura anterior quedó pendiente la aprobación del referendo pese a los esfuerzos de la bancada oficialista, mayoritaria, debido a una decisión de la Corte Suprema de Justicia que decidió abrir una investigación a 86 congresistas que votaron a favor de esa convocatoria en diciembre pasado.
La decisión de la Corte responde a una demanda interpuesta por el representante a la Cámara Germán Navas, del opositor partido Polo Democrático (PD, izquierda).
Navas acusó a sus colegas de prevaricación por no haber esperado una decisión del Consejo Nacional Electoral sobre un contencioso relacionado con los topes para la financiación de la recolección de las más de cuatro millones de firmas necesarias para pedir al Congreso que convoque la consulta.
El referendo propone a los colombianos una enmienda constitucional para que un presidente pueda ser reelegido en tres ocasiones consecutivas. Hasta el 2006 la Constitución colombiana prohibía la reelección, pero Uribe impulsó un controvertido cambio que permitió una sola reelección consecutiva.
La investigación de la Corte despertó el temor de los congresistas de las dos cámaras, que aún tienen que conciliar el texto de la consulta debido a que la Cámara de Representantes y el Senado aprobaron borradores diferentes.
El presidente saliente del Senado, el oficialista Hernán Andrade, admitió la posibilidad de que el referendo no pase, no sólo por el temor de los legisladores a las investigaciones de la Corte, sino también por falta de tiempo.
Las autoridades electorales han advertido sobre el escaso margen que queda para organizar la consulta, toda vez que además del trámite en el Congreso, su texto tiene que pasar el examen de la Corte Constitucional antes de que los colombianos lo voten en las urnas.
En tanto, el presidente Uribe, quien llegó por primera vez al poder en 2002 y goza de una imagen favorable del 68%, según una reciente encuesta de la firma Gallup, aún no ha manifestado públicamente su intención de buscar un tercer mandato en las presidenciales de mayo de 2010.
Uribe tampoco se pronunció al respecto al instalar las sesiones legislativas. Sin embargo, insistió en la necesidad que tiene el país de continuar luchando contra «el terrorismo», bandera de su gestión gubernamental.
«Aun no estamos en el punto irreversible en el rescate de la seguridad», dijo y se quejó de que ese propósito «todavía no logra un genuino comprometimiento de las diferentes tendencias política».
La declaración de Uribe mantuvo la línea de las respuestas que ha dado cuando se le pregunta sobre si desea una segunda reelección, a lo que responde que a lo que aspira es a la reelección de su política de lucha contra el terrorismo.
Las divisiones de la bancada oficialista también conspiran contra la convocatoria del referéndum, como ya sucedió durante la pasada legislatura.
Según ha trascendido en medios de prensa, la pugna por los puestos de dirección de las dos cámaras, especialmente la presidencia del Senado, podría romper los acuerdos previos entre los oficialistas.