Misteriosa explosión en Honduras


Manuel Zelaya, presidente depuesto de Honduras, ha dado por concluido el diálogo con el Gobierno de facto, por lo que no se prevé solución antes de las elecciones generales. FOTO LA HORA: AFP

Una misteriosa explosión sacudió hacia la medianoche de ayer el oriente de la capital hondureña, después de sobrevolar una avioneta, sin dejar más rastros que el olor a pólvora, dijo hoy un portavoz policial.


«Algunos vecinos inclusive funcionarios policiales manifestaron que al escuchar el estruendo, el sonido estridente, sintieron un olor caracterí­stico como a pólvora o a quemado y eso nos hace deducir que se trataba de un dispositivo explosivo o un componente quí­mico», indicó el portavoz Orlin Cerrato.

La explosión estremeció la zona de la colonia Miraflores, especialmente donde se encuentra el Instituto de Formación Profesional (Infop), que presta una bodega al Tribunal Supremo Electoral (TSE) para albergar el material de las elecciones del 29 del presente mes.

Cerrato admitió que en las hipótesis manejadas la explosión «se relaciona con una avioneta que sobrevoló porque después que pasó se escuchó el estruendo, el impacto y algunas personas pudieron ver la aeronave y escuchar el explosivo que detonó y lo que provoca una explosión en el aire: una estela de luz, de fuego».

Los vecinos se alarmaron tanto que ayudaron a las autoridades policiales «peinando» las colonias Honduras, Kennedy, Miraflores y Las Colinas «pero no hemos encontrado ningún indicio», subrayó el oficial.

La capital hondureña ha sido sacudida por una serie de explosiones, que han causado daños materiales muy menores, en medio de la crisis polí­tica desatada desde el 28 de junio cuando los militares y los poderes del Estado derrocaron al presidente Manuel Zelaya.

El mandatario depuesto y el Frente de Resistencia contra el Golpe que lo apoyan han puesto en tela de juicio las elecciones pero en forma pací­fica y han rechazado la insinuaciones de culpabilidad en los atentados.

MICHELETTI Espera reconocimiento


El gobernante hondureño de facto Roberto Micheletti manifestó ayer sus esperanzas de que la OEA le reconozca las elecciones del 29 de noviembre y enví­e observadores, como lo hará Estados Unidos.

«Ese señor (secretario general de la OEA, José Miguel Insulza) un dí­a dice una cosa otro dí­a dice otra, esperamos que cambie muy pronto para que diga que sí­ van a venir, si no ya tenemos una cantidad de observadores del mundo» que llegarán, dijo Micheletti en rueda de prensa con medios hondureños.

El secretario general de la Organización de Estados Americanos reiteró que ese organismo no enviará observadores a Honduras al no reconocer el proceso electoral si antes no se restituye al depuesto presidente Manuel Zelaya.

Micheletti aseguró que el subsecretario adjunto de Estados Unidos, Graig Kelly, quien culminó el miércoles una visita al paí­s, le reiteró el apoyo de Estados Unidos a la realización de las elecciones.

Los estadounidenses «van a aceptar el resultado (de las elecciones) si son libres y transparentes, como esperamos que sean» y «la presencia de él (Kelly) ha dado mucha esperanza sobre la posición de Estados Unidos, porque estamos esperanzados en que se reconozcan las elecciones, tenemos absoluta confianza», subrayó Micheletti.

El gobernante de facto denunció además que las fuerzas armadas y la Policí­a Nacional tienen información sobre que «fuerzas externas están planificando boicotear el proceso electoral», y precisó que serí­an «venezolanos y nicaragí¼enses» quienes pretenderí­a «obstaculizar las elecciones».

Mientras tanto, Zelaya continúa refugiado en la embajada de Brasil desde el 21 de septiembre, tras regresar clandestinamente al paí­s tras ser expulsado del poder por un golpe de Estado el 28 de junio pasado.