Misión con malestar chino


Una delegación argentina, que debí­a haber sido encabezada por la presidenta Cristina Kirchner, llegó hoy a Pekí­n para fortalecer las relaciones comerciales bilaterales, marcadas por el malestar chino por medidas restrictivas adoptadas por Buenos Aires.


«El futuro de la relación bilateral es promisorio. Pero Argentina debe evitar el uso de prácticas antidopaje contra China,» indicó a la AFP un investigador especializado en América Latina de la Academia China de Ciencias Sociales, Jiang Shixue. La institución donde trabaja Jiang es una consultora asociada a lo más alto de la escala de poder en ese paí­s.

«En términos polí­ticos, ambas partes necesitan fortalecer la cooperación para forjar un mejor entendimiento,» afirmó Jiang y recordó que «China está esperando el status de economí­a de mercado y estarí­a contenta de ver más productos argentinos e inversión».

«Si Argentina otorgara el status a China, las relaciones económicas bilaterales avanzarí­an más rápido y mejor,» precisó Jiang.

Durante la visita del presidente Hu Jintao a Argentina en 2004, Buenos Aires anunció el reconocimiento de China como economí­a de mercado, aunque los trámites de ese reconocimiento -que deberí­a dificultar la aplicación de barreras antidopaje y de otras sanciones contra productos chinos- aún no concluyeron.

En 2009, Argentina exportó a China, incluyendo Hong Kong y Macao, por 3.990 millones de dólares e importó por 4.840 millones, según cifras oficiales argentinas.

Argentina pasó de un saldo a favor en la balanza comercial con China de 77 millones de dólares en 2007 a uno negativo de 714 millones en 2008 y de 859 millones de dólares en 2009.

La caí­da de las exportaciones Chinas a Argentina fue de un 32% entre 2008 y 2009. Este cambio se registró durante un año de crisis económica mundial y tras unas 99 medidas antidopaje que impuso el paí­s sudamericano, según consignó la consultora abeceb.com.

En octubre pasado, el viceministro chino de Comercio, Chen Jian, se quejó públicamente por las trabas al comercio que impuso Argentina, según la agencia oficial China Nueva (Xinhua).

El último capí­tulo de las quejas chinas trascendió a fines de noviembre, cuando la agencia citó al consejero comercial de la embajada de ese paí­s en Buenos Aires, Yang Shidi: «Argentina es uno de los paí­ses que adoptan más medidas de restricciones comerciales en el mundo.»

La presidenta Kirchner decidió permanecer en Buenos Aires debido a un diferendo que la opone al vicepresidente Julio Cobos, por lo cual la delegación comercial es presidida por el ministro de Relaciones Exteriores, Jorge Taiana.

La visita de la mandataria «hubiera sido una oportunidad para que ambas partes ganen un mejor entendimiento mutuo,» estimó Jiang.

Gonzalo Paz, investigador en Relaciones Internacionales de la Universidad George Washington de la capital estadounidense, dijo a la AFP que Argentina tiene con China una asociación estratégica, aunque «en cinco años no ha habido una visita de un jefe de Estado Argentino a China». Según Paz esto quita dinamismo a la relación bilateral.

China y Argentina firmaron un acuerdo de asociación estratégica durante la visita del Hu 2004. Argentina, Brasil, México y Venezuela también tienen ese tipo de acuerdo con el gigante asiático.

«Los chinos han usado con flexibilidad el rótulo de asociación estratégica,» afirmó Paz. Sin embargo, diferenció las maneras en que cada paí­s aprovechó ese acuerdo para relacionarse con el paí­s asiático.

«Si bien China no se ha dejado atrapar en la confrontación entre Venezuela y Estados Unidos, la cantidad de proyectos que se realizan en Venezuela es grande,» dijo Paz y precisó: «proyectos de riego, ferroviarios, satelitales, militares, la relación es cada vez más diversa».

«Brasil está desarrollando las relaciones bilaterales (…) y Argentina tiene muchas posibilidades, pero no termina de ponerse en juego», destacó.

«Un altí­simo porcentaje de nuestras relaciones están en torno a la soja y esto es un piso, y no debe ser un techo,» evaluó Paz.

Las exportaciones argentinas se concentran en tres rubros: semillas oleaginosas, aceites vegetales y petróleo y derivados.

En 2009 se colocaron 1.430 millones de dólares en productos primarios y 2.170 millones en manufacturas de origen agropecuario, según datos oficiales. Estos dos í­tems representaron un 90% de las colocaciones argentinas en 2009.