El gobierno venezolano ultimaba hoy los detalles del operativo aerotransportado que, en principio mañana, debe recuperar en la selva colombiana a tres rehenes, entre ellos un niño, que liberarán las FARC, en una iniciativa guerrillera sin antecedentes en más de un lustro.
El asesor presidencial brasileño Marco Aurelio García –uno de los garantes internacionales– y el embajador de Venezuela en Colombia, Pável Rondón, confirmaron que el operativo, se desarrollará mañana, luego de que se reúnan en Caracas los representantes de seis países.
«Esperamos como toda Colombia, toda Venezuela y todo el mundo la liberación de estas tres personas. Estamos a la espera de los garantes internacionales para el operativo que será mañana», señaló Rondón.
El complejo operativo, delineado por el presidente venezolano Hugo Chávez, quien antes de asumir el gobierno era teniente coronel paracaidista, incluye que aviones y helicópteros venezolanos vuelen hasta la ciudad colombiana de Villavicencio, a 500 km de la frontera y en una zona con fuerte presencia de la guerrilla.
Las aeronaves portarán emblemas del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), «lo que los convertirá en neutrales», informó en Ginebra un portavoz, Marcal Izard.
En Villavicencio el delegado de Chávez para la operación, el ex ministro del Interior, Ramón Rodríguez Chacín, recibirá las coordenadas del punto en medio de la selva al cual volarán los helicópteros para recibir a los rehenes, coordenadas que solamente serán comunicadas a los pilotos venezolanos.
Anunciada ayer por el Chávez y aprobada rápidamente por el gobierno colombiano, la misión debe traer a Caracas a Clara Rojas (44 años, rehén desde hace casi seis años), su hijo Emmanuel (3), nacido en cautiverio, y la ex congresista Consuelo González (57, secuestrada desde 2001).
Sus familiares, que viajarán desde Colombia, son esperados hoy en Caracas.
«Estoy feliz y ansiosa por verla. Quiero decirle ya que la adoro, que me muero por estar con ella y le voy a dar infinitas gracias por haber tenido el valor de resistir estos seis años y tres meses que permaneció en cautiverio», dijo desde Bogotá María Fernanda Perdomo, hija de Consuelo González.
Como delegados internacionales irán el ex presidente Néstor Kirchner y el canciller Jorge Taiana por Argentina, Marco Aurelio Garcia por Brasil, el ex ministro ecuatoriano del Interior Gustavo Larrea, el viceministro boliviano de movimientos sociales Sacha Llorenti y los embajadores de Francia y Cuba en Caracas.
También participan el alto comisionado para la paz de Colombia, Luis Carlos Restrepo, y la senadora colombiana Piedad Córdoba, quien fue junto con Chávez mediadora en la búsqueda de un canje humanitario.
Las FARC anunciaron a mediados de diciembre su decisión de liberar unilateralmente a los tres rehenes y entregarlos a Chávez o a quien éste designara, en gesto de «desagravio» por el cese que el gobierno colombiano hizo a su mediación por un acuerdo humanitario en Colombia.
Antes de partir a Caracas, Marco Aurelio García dijo tener «la firme esperanza de que ese paso sea el primero de un largo camino para, en un primer momento, resolver todos los problemas de los rehenes, que son muchos».
Para García, más adelante podría «hasta encontrar(se) una solución de paz para ese conflicto que sacude a Colombia hace más de 40 años».
La liberación de los tres rehenes sería la primera acción de este tipo de parte de las FARC en más de un lustro.
Las FARC retienen a 45 rehenes, entre ellos la franco-colombiana Ingrid Betancourt, tres estadounidenses y decenas de policías, militares y políticos colombianos, que intentan canjear por 500 guerrilleros presos.