Al menos Q97 millones serán erogados por el Ministerio de Salud este año luego que se comprometiera con varios sindicatos a incrementar un 25% sobre el salario base y la entrega de un bono de Q700 a unos 26 mil trabajadores.
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El pasado 19 de febrero se firmó la ampliación de un pacto colectivo, entre ambas partes, el cual se venía discutiendo desde septiembre de 2008.
Por medio del acuerdo, autoridades del Ministerio de Salud también evaluarán, en un plazo de 90 días a partir de la firma del pacto, el incremento de 25% sobre el salario nominal de los empleados, según Rubén Mazariegos, de la Unidad de Acción Sindical y Popular (UASP).
De acuerdo con Mazariegos, los Q700 corresponden a un bono de «Semana Santa», que se hará efectivo en el mes de junio de este año.
Las medidas beneficiarán a trabajadores operativos, técnicos administrativos, médicos, paramédicos, auxiliares de enfermería, enfermeras, trabajadoras sociales; personal de los renglones 0-11, 0-21, 0-22 y 0-31.
El dirigente de la UASP dijo que, también se sentarán las bases para la discusión de un pacto colectivo de mejora en las condiciones de trabajo.
Juan Felipe Estrada, viceministro técnico de la cartera de Salud, indicó que en otro de los acuerdos también se evaluará la continuidad del bono de Q3 mil, que se efectuó en tres pagos entre octubre y diciembre de 2008.
«En septiembre se llevará a la mesa de negociación y se verá la factibilidad del bono de final de año, ya que no está definido el monto, (…) esto dependerá de la economía que tengamos», refirió Estrada.
Estrada señaló que los Q97 millones sólo incluyen el pago del incremento al salario base a partir de febrero, y el pago del bono de Q700 a los aproximadamente 26 mil trabajadores con que cuenta la referida cartera.
«Lo estábamos trabajando desde el año pasado, ya está en el presupuesto», apuntó el funcionario.
El vicepresidente Rafael Espada ofreció una conferencia de prensa para aclarar las dudas surgidas en torno a la adquisición de vacunas para el sistema de salud pública.
En la sede del Ministerio de Finanzas, Espada explicó que después de efectuar una investigación del contrato suscrito con la Organización Panamericana de la Salud (OPS), se detectaron anomalías en los compromisos firmados por ex funcionarios de Gobierno.
Asimismo, se evidenció que la OPS no ofrecía garantías para la distribución de los insumos médicos de acuerdo con las necesidades del sector salud.
Por consecuencia, el Ejecutivo decidió licitar la compra de siete vacunas, y la empresa J. I. Cohen consiguió la adjudicación de la vacuna contra la influenza.
El vicemandatario anunció que próximamente se publicarán las bases de licitación para que las empresas interesadas ofrezcan sus productos en el marco de «un proceso limpio y transparente».