La cinta estadounidense «Mil años de oraciones» del director de Honk Kong Wayne Wang ganó la Concha de Oro a la mejor película, máximo galardón del 55 Festival Internacional de Cine de San Sebastián (norte) que se cierra hoy.
El jurado, presidido por el escritor estadounidense Paul Auster, ha premiado una cinta sobre la incomunicación y la incapacidad o no de un lenguaje para expresar los sentimientos.
El anuncio del premio a «Mil años de oraciones» (A thousand years of good prayers) fue acogido con aplausos y gritos de aprobación por parte de la prensa presente en la lectura del palmarés del certamen donostiarra.
La película relata el viaje del señor Shi (Henry O) para ver a su hija Yilan (Faye Yu), que vive en Estados Unidos y se acaba de divorciar. Este jubilado quiere ayudarle a superar su situación, pero al tratar de averiguar la razón del divorcio, su hija tratará todo el tiempo de evitarlo.
Defraudado, el señor Shi intenta hacer averiguaciones por su cuenta al tiempo que conoce a «Madam», una anciana iraní con la que acabará hablando casi más que con su hija, cada uno en su idioma, ya que ninguno de los dos habla bien inglés.
«El padre va a América para hablar con su hija, pero al final se comunica mejor con una mujer iraní, que ni siquiera habla el mismo idioma», había asegurado el director de la cinta en la presentación de su film el pasado día 26.
La película, basada en un libro de la escritora Yiyun Li, se alzó también con el premio al mejor actor para su protagonista Henry O, impecable en su papel de padre preocupado por su hija, pero que no logra conectar con ella.
La concesión del máximo galardón del certamen a Wayne Wang parece marcar una pequeña reconciliación entre el director y Auster, con quien había codirigido «Blue in the face» y quien escribió el guión de «Smoke», la película que lanzó a la fama a Wang.
Wang había reconocido en la presentación de su película haber tenido ciertas diferencias con el escritor estadounidense al intentar una nueva colaboración juntos tras «Blue in the face».
«Mil años de oraciones» había sonado desde el principio para hacerse con la Concha de Oro a la mejor película en esta 55 edición del Festival de San Sebastián que se cierra en la noche de este sábado con la entrega de los galardones.
La actriz estadounidense Demi Moore se convierte en una ladrona de guante blanco en su último filme «Flawless», dirigido por Michael Radford y que cerrará en la noche del sábado el 55º Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
«Fue una observación de una persona que quiere un puesto ejecutivo en un momento en que no había lugar para las mujeres en el mundo de las grandes finanzas», afirmó la actriz estadounidense ante los medios tras el pase de prensa de su película en la sección oficial fuera de concurso.
En «Flawless», Moore interpreta a Laura Quinn, una ejecutiva de una gran firma de diamantes que desea seguir subiendo en la empresa en los años 60, pero que ve su ambición frenada por el machismo imperante en la compañía.
Quinn se unirá al señor Hobbs (Michael Caine), un empleado de la limpieza que lleva toda la vida en la empresa, pero que se siente traicionado por ella, por lo que entre los dos planearán un gran robo de diamantes.
«El material me pareció fascinante, el trasfondo, la época», dijo Demi Moore, antes de añadir que tuvo que construir un personaje «que tiene que dejar atrás mucho de sí misma, su vida familiar… por su trabajo».
Quinn es «como muchas mujeres que están frustradas por su trabajo, tras llevar su carrera al límite. Creo que ocurre mucho, sobre todo en Hollywood», dijo el director de la cinta, autor de películas como «Il postino» o «El mercader de Venecia».
El personaje «ha entregado todo a su trabajo descubriendo que se ha convertido en una persona fría, en parte de la corporación para la que trabaja. Al final, lo que descubre es como volver a ser humana», añadió Radford.
En la película, el personaje de Moore es admirado por los hombres, pero por su belleza más que por su capacidad de trabajo, a pesar de que para la actriz estadounidense ese tipo de cualidades no deberían ser un factor a la hora de lograr trabajos.
«Creo que es importante no depender de este tipo de cosas para conseguir papeles», aseguró Moore, de 45 años de edad, quien parece alejarse en sus últimos trabajos de papeles como los desempeñados en «Una proposición indecente» o «La teniente O’Neil», en la que comparte pantalla con Viggo Mortensen, cuya película «Eastern promises» se presentó también en el Festival.
«Creo que todas las carreras tienen subidas y bajadas. Cuando me alejé del cine para estar con mis hijos, no pensé si sería difícil volver, pero regresar es un desafío, encontrar papeles interesantes», dijo Moore.
«Significa que tienes que trabajar de una manera más meticulosa», concluyó la ex mujer del también actor Bruce Willis.
La proyección de «Flawless» cerrará la 55ª edición del Festival Internacional de Cine de San Sebastián tras la ceremonia de entrega de los premios del certamen donostiarra, que el presidente del jurado, el escritor estadounidense Paul Auster, dará a conocer a primera hora de la tarde.