Aunque los rumores de enfermedad persiguen al cantante, todo apunta a que Michael Jackson volverá a subirse a un escenario. Esta tarde, a las 15:00 hora española, dará una rueda de prensa en la que parece que dará los detalles de su nueva gira. El rey del pop subastará el próximo mes su rancho de Neverland y varios objetos de su propiedad.

Alrededor de 1″7 millones de euros tienen la culpa de que Michael Jackson vuelve a subirse a un escenario. Al parecer esa es la cifra que cobrará por cada uno de los conciertos que el rey del pop puede dar tras varios años de silencio musical.

La promotora de conciertos AEG live lanzó la noticia de que Michael dará esta tarde una rueda de prensa en la que anunciará algo «especial». Los rumores se han disparado desde entonces y todo a punta de que se trata de una gira de 30 conciertos en Londres para este verano.

Según el diario Evening Standard, las actuaciones tendrán lugar en el 02 Arena londinense, el antiguo Wembley, con capacidad para 20.000 espectadores y podrí­an llegar a ser hasta 50 conciertos. De ser así­ se tratarí­a de la primera vuelta real a los escenarios tras su proceso judicial por abuso de menores en 2005, del que fue absulto.

Las especulaciones van más allá y también hablan de que la estrella del pop está ultimando un nuevo disco en el que colaboran Kanye West y Will.I.Am (The Black Eyed Peas).

Michael Jackson actuó en Londres por última vez en noviembre de 2006, en los World Music Awards, donde fue galardonado por haber vendido más de 100 millones de álbumes durante su carrera. En esa ocasión, en vez de cantar «Thriller», como esperaban sus fans, cantó algunas estrofas de «We are the world» acompañado por un grupo de jóvenes.

Los ingresos de esta serie de conciertos le servirí­an a Jackson para saldar parte de sus deudas. Con este objetivo el rey del pop va a subasta el próximo mes varios objetos de su propiedad, desde las puertas de entrada al rancho de Neverland a los guantes blancos que llevó en el ví­deo de Billie Jean. Más de dos mil objetos que serán vendidos a golpe de martillo en Beverly Hills.