Alemania, una de las grandes favoritas para ganar el Mundial de Sudáfrica, sufrió hoy un importante revés tras anunciar que el líder de la selección germana, Michael Ballack, se perderá la cita por una lesión en el tobillo derecho.
«El capitán del equipo nacional Michael Ballak está fuera del Mundial de Sudáfrica», anunció hoy la Federación de Alemania de Fútbol (DFB) en un comunicado de prensa, tras la prueba médica realizada al jugador en Múnich.
El volante del Chelsea, que ha jugado 98 partidos con su selección, se lesionó el sábado en su último partido con el club londinense, en la final de la Copa de Inglaterra contra el Portsmouth, que ganó su equipo por 1-0.
Una resonancia magnética practicada este lunes en Múnich (sur de Alemania) por el médico de la selección germana, Hans-Wilhelm Mí¼ller-Wohlfahrt, reveló que el jugador de 33 años será baja al menos ocho semanas.
«Su tobillo derecho va a ser primero inmovilizado con una escayola», precisó la DFB en un comunicado. Después deberá llevar un calzado especial durante dos semanas.
El examen practicado, destinado en un principio a conocer si la lesión había alcanzado a los ligamentos, mostró que su tobillo derecho, que sufrió una dura entrada del alemán de origen ghanés del Portsmouth, Kevin-Prince Boateng, estaba muy inflamado.
Este descarte supone un duro golpe a las aspiraciones de los hombres de Joachim Low, que ya empezó la preparación en Sicilia de cara al Mundial, que se organiza del 11 de junio al 11 de julio.
«Estamos muy tristes de que un jugador tan importante, nuestro capitán, un jugador de clase mundial se pierda la cita futbolística. Ha sido un duro choque, pero ahora debemos reunir todas nuestras fuerzas, no podemos resignarnos», afirmó el técnico Low.
«Los jóvenes deben ahora superarse. Debemos trabajar para encontrar una solución (para sustituir a Ballack) de manera satisfactoria», añadió el seleccionador desde Sicilia.
Para Ballack es un golpe muy duro en su carrera. «Es duro aceptarlo. Estoy decepcionado», aseguró el jugador. «Es un golpe muy amargo cuando uno recibe un diagnóstico así a pocas semanas del Mundial pero el fútbol es así y hay que seguir adelante», añadió.
Theo Zwanziger, presidente de la federación alemana, tampoco pudo esconder su amargura.
«Mi tristeza es infinita. Ballack ha aportado muchas cosas al fútbol alemán estos últimos años y habría merecido participar en el torneo cuando iba a tener su 100ª selección», dijo el presidente.
El técnico de los subcampeones de Europa vuelve a tener un contratiempo después de que Rene Adler, quien se presentaba como portero titular en Sudáfrica, se lesionó hace un mes.
Además, Low debe esperar hasta el 24 de mayo, a tres semanas del primer partido contra Australia, para recuperar a Philipp Lahm, Bastian Schweinsteiger y Mario Gómez, puesto que disputarán el sábado con el Bayern Múnich la final de la Liga de Campeones contra el Inter de Milán.
El seleccionador podría confiar en Schweinsteiger, que ha realizado una buena temporada con el Bayern, en detrimento de Mesut Ozil.
Por otra parte, Low podría llamar a Thomas Hitzlsperger de la Lazio de Roma, o a Torsten Frings del Werder Bremen.
Sudáfrica debía haber sido para Ballack, que persigue su primer éxito internacional, su tercera y último Mundial después de 2002 (segundo) y 2006 (tercero).
Durante su carrera, Ballack quedó segundo en la Liga Campeones que su equipo el Chelsea perdió en 2008 ante el Manchester United y en 2002 cuando cayó con el Bayer Leverkusen contra el Real Madrid.
El jugador empezó su carrera en Chemnitz antes de pasar al Kaiserslautern (1997-99), Bayer Leverkusen (1999-2002), Bayern Múnich (2002-2006) y Chelsea, donde sigue jugando.