Sorpresiva y contundente, la selección mexicana selló ayer de forma anticipada su pasaporte a los cuartos de final de la Copa América de Venezuela-2007, tras superar 2-1 a Ecuador por la segunda fecha del Grupo B y dejar a su rival de turno sobre el filo de la cornisa.
Bajo la égida del penta-pichichi Hugo Sánchez, los aztecas se apuntaron su segunda victoria del certamen y pasaron a comandar la llave en exclusividad con 6 unidades, escoltado por Brasil y Chile con tres puntos cada uno.
La incisiva búsqueda de la red rival recompensó a los 22 minutos de juego a Castillo, que recibió un pase cruzado en profundidad de Rafael Márquez y abrió el marcador con toque corto.
La reacción ecuatoriana no se hizo esperar. Un zurdazo de Cristian Benítez arañó el vertical derecho y acto seguido el árbitro boliviano René Ortubé invalidó a instancias de su primer asistente una conquista de Ulises de la Cruz por fuera de juego.
El segundo tiempo la titánica tarea del volante Jaime Correa en la recuperación del balón y la movilidad de Márquez fueron dándole forma a una trabajosa imposición mexicana que tuvo su corolario con el minuto 84, cuando el experimentado Cuahtémoc Blanco puso la primer pelota que tocó en la cabeza de Omar Bravo para que éste ampliara diferencias.
Dos minutos más tarde y con el último aliento, Méndez desde afuera del área decretó el descuento, pero no le alcanzó a su equipo para tentar siquiera la igualdad.
Con este resultado, México le pone color y picante al máximo torneo continental, inscribe su nombre entre los ocho mejores y deja al borde de la eliminación a Ecuador, que solo dispone de una mínima chance de llegar a la segunda ronda.
Para cristalizar la clasificación con ribetes de utopía, los ecuatorianos deberán golear a Brasil el próximo miércoles en el cierre de la llave, que se escenificará en la ciudad de Puerto La Cruz, al tiempo que México, con el boleto a cuartos en su bolsillo, enfrentará a Chile.