La canciller alemana Angela Merkel, cuyo país ejerce la presidencia de la Unión Europea, estimó hoy en el Europarlamento que la UE sufrirá un «fracaso histórico» si no resuelve antes de las elecciones europeas de 2009 la crisis por su proyecto de Constitución.
En forma casi simultánea, la candidata socialista a la presidencia francesa, Ségolí¨ne Royal, se pronunció por un nuevo referendo en Francia en 2009 «sobre un tratado que permita funcionar a las instituciones europeas», tras el bloqueo provocado por el «No» de los galos a la Constitución de la UE en mayo de 2005.
«Es necesario de aquí a las próximas elecciones (europeas), en 2009, que ese proceso sea concluido. Un fracaso sería un fracaso histórico, sería desaprovechar el punto de inflexión de la Historia», dijo Angela Merkel en un discurso de presentación del programa de la presidencia alemana de la UE en la sede del Europarlamento en Estrasburgo (este de Francia).
«Sabemos que con las reglas actuales la UE no puede ser ampliada y no tiene la posibilidad de tomar las decisiones necesarias», agregó ante los eurodiputados reunidos en sesión plenaria.
En su cumbre de junio de 2006, los jefes de Estado y de gobierno de la UE encargaron a la presidencia alemana presentar al final de su mandato, en junio próximo, un plan para salir de la parálisis institucional provocada por el rechazo de franceses y holandeses a la Constitución europea a mediados de 2005.
El objetivo es llegar a una solución definitiva bajo presidencia francesa de la UE en el segundo semestre de 2008 para que pueda ser aplicada en 2009, año de las próximas elecciones europeas.
Hoy, Merkel se comprometió una vez más a que la UE tenga antes del 30 de junio una «hoja de ruta» para salir del bloqueo.
«Necesitamos descripciones claras de las competencias de la UE y los Estados miembros. Las reglas de procedimiento deben ser definidas con más claridad», señaló la canciller, al dar pistas sobre la posible propuesta alemana.
«Los tratados fundamentales que tenemos deben ser adaptados a las nuevas condiciones si la UE quiere existir en el mundo de mañana», estimó Merkel.
El Tratado de Niza, acordado con muchas dificultades por los Quince en diciembre de 2000, estableció los mecanismos de decisión de una UE de hasta 25 miembros, pero ya no es capaz de administrar un bloque de 27 países tras la llegada el 1 de enero de Bulgaria y Rumania.
En total, 18 países de la UE, entre ellos España, ratificaron hasta el momento la Constitución europea. Otros siete países postergaron ese procedimiento sine die.
Si bien Merkel se pronunció por una solución antes de 2009, fue mucho más discreta en cuanto al contenido del futuro tratado, pidiendo simplemente la creación de un ministro europeo de Relaciones Exteriores, uno de los puntos del proyecto de Tratado constitucional.
De su lado, la candidata socialista a la presidencia francesa, Ségolí¨ne Royal, propuso un nuevo referendo en Francia en 2009 «sobre un tratado que permita funcionar a las instituciones europeas», afirmando estar «dispuesta a tomar riesgos políticos».
Aunque Royal no pretende someter el mismo texto rechazado en Francia en mayo de 2005, tampoco quiere que «los franceses penalicen a los países europeos que ya se pronunciaron».
«Lo que quiero es que haya un capítulo social y que los derechos de los trabajadores sean tomados en cuenta en Europa», declaró.