El gobierno alemán es nuevo, pero el mensaje de Angela Merkel sigue siendo el mismo: la canciller estrenó hoy su tercer mandato consecutivo instando a los países europeos en crisis a aplicar las reformas prometidas y abriendo la puerta a una modificación de los Tratados Europeos.
«La credibilidad de Europa sufrió demasiadas veces por compromisos y resoluciones no cumplidos», señaló la líder cristianodemócrata (CDU) en su primera declaración ante el Parlamento después de asumir este martes su nuevo gobierno al frente de una «gran coalición» con los socialdemócratas del SPD.
Merkel abogó por que los socios de la Unión Europea (UE) firmen acuerdos vinculantes con la Comisión Europea para aplicar las reformas necesarias. Si luego no cumplen lo prometido, afrontarán las consecuencias en la distribución de fondos estructurales comunitarios, adelantó.
La canciller también insistió en la necesidad de corregir los fundamentos de la Unión Europea (UE) para evitar nuevas crisis, lo que a su juicio exigiría una reforma de los Tratados de Lisboa. «Quien quiera más Europa, tendrá que estar dispuesto a regular de nuevo algunas competencias».
El discurso ante el Parlamento, centrado en el Consejo Europeo de mañana y el viernes en Bruselas, sirvió para que Merkel analizara el estado actual de la crisis e insistiera en que «la política europea será una de las principales tareas del nuevo periodo legislativo».
«Europa avanzó mucho en el camino a la estabilidad y el crecimiento», destacó la canciller. «La crisis de deuda sin duda no está superada. Pero vemos los primeros resultados y estamos convencidos de que puede ser superada de forma permanente».
Merkel puso como ejemplo a Irlanda y España, primeros países en condiciones de abandonar los programas de ayuda europeos que recibieron durante la crisis.
«Con España e Irlanda tenemos a dos países que pueden recoger los frutos de sus reformas. Demuestra lo mucho que se hizo en estos países. Sólo puedo felicitarlos», dijo ante el aplauso de la cámara. «También en Portugal vemos una evolución positiva y en Chipre y Grecia hay una serie de progresos».
Ahora toca combatir las causas profundas de la crisis, añadió mencionando el endeudamiento excesivo en algunos países, déficits de competitividad, desequilibrios económicos y desviaciones del sector financiero.
Como desafíos inminentes, Merkel citó el fomento del empleo juvenil y avanzar a la unión bancaria, uno de los temas centrales en el Consejo Europeo de esta semana. «El gobierno alemán apoya una regulación inteligente en los mercados financieros, en particular del sector bancario», señaló.
Otro tema de la cumbre en Bruselas será la situación en Ucrania. Merkel subrayó que la oferta europea a Kiev para firmar un tratado de asociación sigue en pie. «Pero Ucrania debe garantizar lo que esperamos de todo país: garantías razonables para los derechos democráticos y cumplimento de normas básicas democráticas».