El temor al fracaso de las negociaciones para reducir la deuda en Estados Unidos se sumó hoy a la preocupación de antemano existente sobre la deuda europea y generaron el colapso de los mercados bursátiles en todo el mundo.
Se espera que un supercomité especial de reducción de déficit en Washington admita el fracaso de su intento por llegar a un acuerdo sobre la forma de mejorar las finanzas del gobierno por 1,2 billones de dólares para la próxima década. El principal obstáculo en las negociaciones del panel bipartidista fue el acordar cuánto recabar por los nuevos impuestos.
El fracaso de la comisión podría disparar aproximadamente un billón de dólares durante nueve años en reducciones de gasto generales automáticas que algunos inversionistas temen que no resulten lo suficientemente buenas como para sostener el crecimiento y crear empleos.
Con los corredores de bolsa temiendo otra sombría semana de pérdidas, los mercados bursátiles cayeron estrepitosamente. El británico FTSE 100 cayó 2,0% a 5.254,76 mientras que el alemán DAX se desplomó 2,4% a 5.662,23 y el francés CAC-40 perdió 2,3% para llegar a 2.926,98.
Luego que la mayoría de los mercados asiáticos cerraron a la baja, Wall Street estaba preparado para perder piso. Los futuros del industrial Dow Jones descendieron 1,2% a 11.621 y los futuros de S&P 500 cayeron 1,5% a 1.195,20.
Los mercados bursátiles de Asia declinaban hoy después de un cambio de gobierno en la endeudada España y las advertencias de funcionarios asiáticos sobre la marcada desaceleración del crecimiento económico acrecentada por los retos que enfrenta la economía mundial.
El crudo estaba por debajo de los 98 dólares el barril y el dólar descendió ante el euro y el yen.
El índice Nikkei 225 del Japón perdió 0,3% a 8.348,27, su cierre más bajo desde marzo de 2009 y el Hang Seng de Hong Kong cayó 1,4% a 18.225,85. El Kospi de Corea del Sur bajó 1% a 1.820,03. El S&P/ASX 200 de Australia descendió 0,3% a 4.163.
Los índice de Singapur, Taiwán y en China también registraron bajas.
El nerviosismo de los mercados era evidente un día después que España votó por un nuevo gobierno, siendo la tercera vez en tres semanas en que la crisis de la deuda en Europa cambia un gobierno. Otros gobiernos con problemas financieros como Grecia e Italia también cayeron.
España cambió al gobierno socialista ayer por el liderazgo conservador de Mariano Rajoy, quien hereda un economía quebrantada por la deuda y una pesadilla de desempleo que supera el 21% y que la coloca como la mayor entre las 17 naciones de la eurozona.
Rajoy también debe reducir la creciente tasa de endeudamiento con medidas para reducir el déficit al tiempo que impida que la ya moribunda economía se dispare a una recesión de dobles dígitos.
Agregando al pesimismo, se informó que el vicepresidente de China, Wang Qishan, que supervisa el comercio y las finanzas, pronosticó este fin de semana que era probable que los problemas económicos mundiales se prolongaran a largo plazo.